Melilla ha cerrado 2023 con 3.000 contratos laborales menos respecto a 2022, de los cuales casi 700 corresponden al último cuatrimestre, cuando el Gobierno cambió el modelo de bonificación del 50 % a las cuotas patronales de la Seguridad Social, una de las más importantes ventajas fiscales que tenían Ceuta y Melilla desde 2004.
En declaraciones a los periodistas, el representante de la partronal ha atribuido estos datos a la inseguridad jurídica que, según ha dicho, está sufriendo el tejido empresarial de la ciudad autónoma como consecuencia del Real Decreto 660/2023, que cambió la bonificación por una subvención.
Ha dejado claro que, sin esa seguridad jurídica, los empresarios no invierten ni contratan, lo que da lugar a esas cifras, que la patronal relaciona con la pérdida de la bonificación desde el 1 de septiembre del año pasado.
Acompañado por el vicepresidente de la organización empresarial, Chakib Mohamed, Alcoba expuso esta problemática en una reunión con el presidente de la Ciudad Autónoma, Juan José Imbroda, a la que también ha asistido la diputada nacional del PP por Melilla, Sofía Acedo.
Durante el encuentro, les han informado de que han solicitado a la delegada del Gobierno, Sabrina Moh, que ambas confederaciones empresariales, tanto la de Melilla como la de Ceuta, puedan mantener una reunión en el Ministerio de Política Territorial “para hacerle ver el perjuicio” que ocasiona esta situación a las dos ciudades, sus empresarios y trabajadores.
En caso de que no sea posible, intentarán ir de la mano con la CEOE y, en función de la respuesta, si la situación sigue igual a finales de este mes, a principios de marzo harán una concentración ante la Delegación del Gobierno.
Los empresarios entienden que este asunto depende de “voluntad política de querer buscar soluciones” por parte del Gobierno, al igual que ya sucedió el año pasado con los cambios en la normativa que afectaba a la bonificación para los autónomos.