La Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (FAMPA) de Melilla ha respaldado a la familia del menor que, supuestamente, agredió a dos profesores en el Instituto Enrique Nieto la semana pasada. En este sentido, defienden que el alumno, según cuenta, también fue agredido por parte de los docentes del Aula Abierta por "un brote psicótico" que le dio a raíz de sus necesidades especiales.
El pasado viernes 20 de octubre, desde el Instituto de Educación Secundaria Obligatoria y Bachillerato Enrique Nieto, los docentes del centro se congregaron a las puertas del Instituto para manifestarse en silencio en apoyo a sus compañeros agredidos.
Los sindicatos de educación de la Federación de Enseñanza USO Melilla (Feuso), la Unión General de los Trabajadores (UGT), el Sindicato Autónomo de Trabajadores de la Enseñanza (Sate Stes) y Csif estuvieron presentes en el acto de la concentración.
Ante estos hechos, la Fampa de Melilla, junto a los familiares del menor, convocaron a los medios de comunicación para respaldar su postura.
El presidente de la federación, Joan Casares, explicó que en las Aulas Abiertas con niños discapacitados, un profesor aisló al alumno de necesidades especiales "llegando a provocarse un estado de ansiedad a tal nivel, que parece ser que el menor agredió al profesor, pero que el profesor, según relata el menor, agredió también al niño por lo que avisaron a la madre", explicaba el presidente de Fampa Melilla ante los medios.
Por ello, al alumno, le dio "algo parecido a un brote psicótico, un golpe ansiedad muy grande" donde tuvieron que inmovilizarlo entre varios profesores contra al suelo. De seguido, la ambulancia tuvo que asistir al centro educativo para llevarlo al hospital".
"El niño tuvo que salir del colegio acompañado de la ambulancia y existe un parte de daños físicos al menor. El hospital les aconsejó que fueran a denunciar porque si no, iban a activar el protocolo de maltrato infantil. Los padres, al ver que el menor seguía con mucho sufrimiento, fueron a denunciar en comisaría", explicó Joan Casares.
Por la situación de desconcierto cognitiva del alumno a raíz de sus necesidades especiales, el menor "relataba constantemente como el profesor le agredió fuertemente con un estuche de colores" de camino al Hospital en el interior de la ambulancia.
Desde Fampa Melilla estiman que "tiene que haber algún tipo de sanción, y que tanto la dirección del centro como el profesor del alumno tienen que cuestionarse las actuaciones, a la vez que el profesor ser apartado de esa Aula Abierta".
"Nosotros lo que le denunciamos es que las aulas abiertas que se han abierto en los centros de Melilla, y posiblemente muchos lugares de España, no tienen el personal adecuado en los profesores de Educación Especial preparados o el personal de apoyo preparado porque da lugar a este tipo de situaciones. Como presidente de la federación, he conocido cuatro casos y nunca la familia ha querido llevarlo a denunciar, a veces lo hemos llevado al juzgado, pero siempre se ha criminalizado a la familia y a los niños", dijo Joan Casares.