Todos los sindicatos con representación en Melilla en el ámbito de la educación pública en nuestra ciudad realizaron ayer un comunicado demoledor sobre la falta de dedicación, atención y política adecuada que el Ministerio del área realiza respecto de Melilla.
Trascurrido tiempo suficientes para que el sector docente pudiera comprobar la falta de cumplimiento de las muchas promesas del ministro Gabilondo, los sindicatos han reaccionado todos a una para coincidir con lo que hace unos días decía en estas mismas páginas el consejero de Educación y candidato por el PP, Antonio Miranda, quien reprochaba al Gobierno central su falta de atención a Melilla en el ámbito de la Educación pública.
Esta vez no es una voz partidista la que se pronuncia. Lo hacen los mismos sindicatos que luego no actúan al unísono sino como adversarios en procesos electorales o a la hora de repartirse sus cuotas de poder en la Junta de Personal Docente, representativa de todos los profesores no universitarios de la Educación pública en Melilla.
Los índices de fracaso escolar y abandono temprano son tan altos en Melilla, estamos tan a la cola de la cola que con declaraciones conjuntas como las realizadas por los sindicatos de enseñanza es posible entender los motivos que explican la dificultad para encontrar soluciones a tan dramática realidad.
Entre tanto, desde el PSME-PSOE se insiste en vendernos la Escuela 2.0, mientras que la realidad se esconde, se niega y se discute con achaques sectarios que al final caen por su propio peso.