La ONG humanitaria reseña que la mayor parte de las llegadas a Melilla se efectúan a través de los pasos fronterizos y que la llegada de pateras es un fenómeno puntual.
La asociación humanitaria Prodein cifró ayer en diez personas por día el número de entradas de inmigrantes de manera irregular en la Ciudad Autónoma de Melilla. Un fenómeno que, tal y como apuntó el máximo dirigente de la ONG, José Palazón, viene dándose desde hace tiempo, aunque con el comienzo del buen tiempo se espera que se incremente el número de llegadas por vía marítima.
No obstante, recalcó el fenómeno de las pateras, que se ha intensificado en las últimas semanas, es puntual, ya que la mayor parte de las entradas se producen a través de los distintos puestos fronterizos que separan la Ciudad Autónoma del reino alauita.
“La gran diferencia es que las pateras son más visibles, y la gente suele hacerse eco de sus llegadas porque son interceptadas al aproximarse a la costa”, señaló Palazón, “pero el grueso de entradas se sigue produciendo a través de Beni-Enzar, con los inmigrantes ocultos en vehículos”.
En cuanto al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes de Melilla (CETI), los niveles de ocupación continúan al límite. Una situación que ha provocado que las entradas y salidas de residentes se hayan convertido en una constante.
De igual modo, Palazón aseguró que lo más probable es que esta situación se mantenga durante gran parte de los meses de verano, ya que la llegada del buen tiempo provoca que los inmigrantes se aventuren a intentar llegar a Melilla, no sólo en patera, sino también a nado.