La senadora del PP, María del Carmen Dueñas, recuerda que se está incumpliendo la normativa en materia de prevención de riegos laborales en muchos casos.
El Ministerio del Interior considera que las condiciones de trabajo de los agentes de la Guardia Civil en Melilla no son tan malas como afirma el PP en sus denuncias, estimando que esta formación política “tiende al apocalipsis”.
En este sentido, la senadora del PP por Melilla en la Cámara Alta, María del Carmen Dueñas, explicó ayer la última intervención que realizó con motivo de la interpelación que presentó en Comisión al secretario de Estado de Interior, Antonio Camacho, en torno a esas condiciones de trabajo extremas en algunos casos, como ha denunciado en diversas ocasiones la Asociación Unificada de la Guardia Civil en la ciudad, en particular en lo que respecta a las garitas de vigilancia en algunas zonas de Melilla.
Así, comentó que se mostró sorprendida por algunas de las respuestas que dio Camacho, pues por su parte, llegó a presentar fotografías donde se mostraban esas condiciones de inhabitabilidad en la que desarrollan su trabajo muchos agentes.
Dueñas recordó que muchos de los puestos de vigilancia de la Guardia Civil incumplen la normativa en materia de prevención de riesgos laborales y adjuntó que la propia Comisión Europea había instado al Gobierno español en varias ocasiones a que cumpliera con esa legislación.
“Las respuestas no fueron positivas”, afirmó y añadió que hay situaciones graves como por ejemplo la de la garita del Museo Militar, pues carece de aire acondicionado y calefacción y adjuntó que hay una sombrilla de paja para cubrir a los agentes del sol. Además, la puerta de la garita estaría rota en estos momentos.
La senadora no se quedó en este caso en concreto pues también puso en tela de juicio la situación del puesto de vigilancia ubicado en las cercanías de la depuradora de aguas residuales.
Sobre este extremo señaló que en este caso “hay un hedor insoportable” y también se estaría incumpliendo la normativa en materia de seguridad e higiene, por las condiciones ambientales en las que debe desarrollarse el trabajo.
Dueñas comentó que los agentes que prestan servicio en la zona no pueden abstraerse del fuerte olor, pues deben salir fuera de la garita para poder realizar las labores de vigilancia, una situación que debería solucionarse cuanto antes para evitar problemas.