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Los melillenses estuvieron venciendo hasta que faltaba diez minutos pero el EBIDEM Melilla se quedó con las miel en los labios otra vez.
Otra nueva jornada en blanco para el conjunto del EBIDEM Melilla en su partido de liga ante el Pedro Alonso Niño de Moguer, cayendo derrotados por el resultado de 28-33, en un partido donde el equipo que se mereció mejor suerte a la hora de conseguir la victoria, sin lugar a dudas, fue el cuadro de nuestra ciudad puesto que durante todo el choque se mantuvo con buenas distancias en el marcador y sin ver peligrar el resultado final, cantando toda la afición la que pudo ser la primera victoria de la presente temporada liguera.
Pero fue lejos de la realidad ya que incomprensiblemente en los últimos diez minutos de partido comenzarán a aparecer numerosos fallos tanto en el ataque como en defensa que fueron aprovechados por los onubenses para hacerse acreedores de la victoria al final de este choque.
Cabe destacar que los jugadores de nuestra ciudad se medían ante el segundo clasificado y que llegó a tierras melillenses un poco relajado menospreciando a los melillenses que se dejaron todo sobre la pista de juego del pabellón municipal Lázaro Fernández, en busca de darle la primera de las alegrías a todos sus aficionados que le llevan respaldando sin ningún tipo de suerte desde que comenzó.
Sin lugar a dudas, una de las posibles claves fue el cansancio físico que hizo mella en los amarillos durante estos últimos minutos.
Una verdadera pena puesto que la plantilla dirigida por Jesús Moreno y Pablo Torres ya se están mereciendo conseguir derrotar a algunos de sus rivales clasificatorios.
El cuadro de nuestra ciudad tendrá que olvidar cuanto antes esta nueva derrota tras la realización de un gran partido en líneas generales, circunstancia que no es la primera vez que le ocurre en la presente temporada liguera.
El próximo compromiso de los jugadores melillenses será en la matinal del próximo domingo, a partir de las 12:00 horas, en tierras valencianas donde se tendrá que medir al conjunto del Maristas Algemesí, que se encuentra situado en la quinta posición de la clasificación general.
A los melillenses tan sólo le restan tres jornadas para la conclusión de su temporada regular y se conjuraron para intentar no irse de vacío y al menos conseguir una victoria, aunque este desplazamiento se presenta poco propicio para poder conseguirlo debido a la calidad de los valencianos que ya lo pusieron de manifiesto en el choque de ida en tierras melillenses.