La asociación de la Benemérita denuncia el ataque sufrido por dos policías en La Cañada el pasado día 25.
La Junta Directiva Nacional de la AEGC (Asociación Española de Guardias Civiles) ha celebrado, junto a los representantes provinciales de la agrupación, su Asamblea Nacional. En esta reunión, reclamaron al Ministerio del Interior que ponga a disposición de los agentes “un servicio jurídico especializado” para reclamar daños a quienes perpetren agresiones contra los agentes.
En un comunicado al que ha tenido acceso El Faro, la AEGC denuncia el ataque sufrido por dos agentes de la Policía Nacional el pasado domingo en el barrio melillense de La Cañada. En ese incidente fue apedreado el vehículo policial en el que viajaban y además fue sustraída una escopeta de su armero.
La asociación exige asimismo que se apliquen “las mayores penas a estos delincuentes”.
“Penas muy leves”
Para la AEGC, conductas delictivas como la ocurrida en La Cañada el pasado domingo son castigadas “con penas muy leves que no sirven como medidas correctoras para estos actos”.
En otro orden de asuntos, la Asamblea de la AEGC se ha comprometido asimismo a “seguir trabajando para lograr la equiparación salarial de policías y guardias civiles”. Para ello, sobre todo en esto tiempos “de crisis económica”, la asociación llama a “concienciar a los ciudadanos y a la clase política de la discriminación que sufren los guardias civiles que actualmente tienen un salario neto un 35% inferior al que perciben policías locales y autonómicos (entre 500 y 600 euros menos)”.
Medallas y recompensas
Por otro lado, la asociación destacó en este escrito el malestar que genera en estos agentes la distribución de medallas y recompensas. Subrayó que no es nada nuevo, pero muchos delegados mostraron su disconformidad con las condecoraciones otorgadas porque reflejan “un desprecio absoluto por el trabajo de los guardias civiles de base”.
La AEGC destacó que tan sólo se premia a un 24% de los guardias y cabos frente a un 76% de las medallas que se dan a escala superior de oficiales.
“Estos porcentajes son tan evidentes que no se pueden maquillar”, aseveraron y piden una valoración más objetiva.