Una dotación completa de siete bomberos y dos mandos, con una bomba urbana pesada y una nodriza, junto con un vehículo de altura que no hizo falta utilizar, apagó el miércoles un fuego originado en un dormitorio de una vivienda del barrio de Las Palmeras por el que afortunadamente ninguna persona resultó afectada.
Según confirmaron a El Faro fuentes del Cuerpo, se trataba de un primer piso y, tras recibir las llaves de parte de los propietarios (quienes no se encontraban dentro, sino que los estaban esperando fuera), el equipo de Bomberos localizó el foco en uno de los dormitorios y se procedió a la extinción del fuego.
Además, como el humo del incendio afectó a dos o tres viviendas colindantes, se dio instrucciones a los vecinos de que no bajaran y de que cerraran las puertas de sus viviendas para evitar que entrara el humo, porque, según declararon estas fuentes, el fuego no era de tan grandes dimensiones como para evacuar el inmueble entero.
Cabe recordar que, a mediados de agosto, también en el barrio de Las Palmeras, otra casa se quemó, también comenzando el fuego por una de las habitaciones. En este caso, Bernardo y Samira, así como sus hijos, acudiieron al Palacio de la Asamblea a pedir la ayuda de la Ciudad Autónoma. Tras pasar varios días en un albergue, un contratista con el que se contactó a través de Emvismesa se ofreció a arreglares la casa de manera gratuita, según informó entonces el consejero de Medio Ambiente y Sostenibilidad, Hassan Mohatar.
Bernardo Artilla y Samira Chberreq y sus tres hijos tuvieron el problema de que la habitación había quedado prácticamente “inhabitable” y, además, la vivienda se vio afectada por la gran cantidad de humo producido durante el suceso. Lo que los Bomberos encontraron al lugar en cuestión era “una habitación en llamas”