Con un total de 196 unidades iniciadas en 2021, la construcción de viviendas en la ciudad descendió un 4,4% con relación al año anterior, según lo evidencian las estadísticas manejadas por la delegación de Melilla del Colegio Oficial de Aparejadores de Málaga sobre los visados y los registros de actuaciones profesionales.
El claro estancamiento en la construcción de obras de nueva planta de uso residencial mantiene al sector lejos de los niveles pre pandemia, con aproximadamente un tercio menos de viviendas iniciadas que en 2019 o en 2018. En ambos periodos previos a la emergencia sanitaria se superaron al menos las 300 casas.
Contraria a otros datos como los de viviendas proyectadas o las licencias concedidas, la información suministrada por los Colegios de Aparejadores y Arquitectos Técnicos al Ministerio de Fomento sobre la edificación de vivienda, que deriva de los certificados sobre la intervención de estos profesionales en la dirección de ejecución de las obras, muestra el panorama real del sector.
La intervención efectiva del aparejador o el arquitecto técnico en la obra, tras la emisión de los mencionados certificados, hace que los analistas se pronuncien con mayor certidumbre en torno a la realización de una construcción y su inicio inmediato. De hecho, es imposible comenzar legalmente la ejecución material de la promoción de viviendas sin contar con dicha intervención.
Al margen de la obra nueva residencial, el número global de visados de actuaciones profesionales de los aparejadores y los arquitectos técnicos creció ligeramente en 2021 en Melilla, con un aumento del 3,8% en comparación con el año anterior. No obstante, este indicador se refiere solo a los encargos. Es decir, comprende los casos que lo solicitaron porque es un trámite que no es obligatorio.
¿De qué sirve el visado?
El visado de los trabajos y las intervenciones profesionales es un acto de supervisión encaminado fundamentalmente a controlar y garantizar al ciudadano y a las empresas, la legalidad, la calidad y la seguridad de las actuaciones. Su coste es "mínimo y razonable", visto que el Colegio es una entidad sin ánimo de lucro, y se tramita con rapidez y comodidad de manera electrónica.
El recién nombrado delegado del Colegio de Aparejadores en Melilla Toufik Diouri ha insistido en la importancia del visado por "el valor añadido que adquieren los particulares al requerir que la documentación profesional relativa a sus obras y trámites urbanísticos sea visada y registrada en el respectivo colegio profesional".
En ese sentido, el visado es una garantía de los servicios profesionales para el destinatario porque acredita la identidad y la habilitación profesional del autor del trabajo, que tiene un seguro de responsabilidad civil vigente.
Asimismo, el visado certifica la corrección y la integridad formal de la documentación del trabajo profesional de acuerdo con la normativa aplicable; y permite al Colegio atender quejas y reclamaciones de los usuarios, y ejercer el control deontológico sobre el colegiado.
Además, como el Colegio registra, archiva y custodia toda la documentación técnica sometida a visado, puede, a petición de quien acredite interés legítimo, emitir certificaciones sobre su contenido.