La Asociación Profesional de Suboficiales de las Fuerzas Armadas (Asfaspro) pide la dimisión de la subsecretaria de Defensa Amparo Valcarce por manifestar que no se deben comparar las retribuciones del personal militar con el personal civil, ni siquiera con el de otros cuerpos de seguridad, como la Guardia Civil.
De acuerdo con Asfaspro, las declaraciones de la Subsecretaria, hechas durante un encuentro con la Asociación de Periodistas de Defensa el pasado martes, manifiestan "deslealtad y desprecio hacia el personal militar" y, "cuando una autoridad ni valora ni mantiene el debido y necesario respeto y lealtad hacia sus subordinados, lo ético y lo más coherente es presentar la inmediata dimisión y dedicarse a otra cosa".
En ese sentido, la Asociación se cuestiona "¿con quién se puede o se tiene que equiparar un militar?" si, según la Subsecretaria, "no podemos compararnos con los miembros de una institución de naturaleza militar, jerarquizada y armada como lo es la Guardia Civil".
Asfaspro recuerda que, como sus integrantes no cobran por la prestación de guardias, la realización de horas extraordinarias, peligrosidad p penosidad, tampoco podrían equipararse "con los miembros de la Policía Nacional, con los policías autonómicos o locales, con los bomberos, con los sanitarios o con cualquier otro trabajador público o privado".
En palabras de Asfaspro, pareciera que a la Subsecretaria "le da igual que los miles de mujeres y hombres bajo su responsabilidad directa en materia de personal, tengan que patrullar por parajes helados, desiertos o selvas lejanas desactivando minas y artefactos explosivos o sufriendo atentados terroristas" o "que se vean sometidos a situaciones de fuego real tanto en su instrucción como en los despliegues en zona de operaciones"
También, agrega Asfaspro, que la funcionaria no tiene en cuenta "que puedan ser paracaidistas, buceadores de combate, escaladores, desactivadores de explosivos; que las autoridades civiles o militares requieran su presencia urgente en todo tipo de emergencias o catástrofes; que piloten aeronaves, que las reparen o que ejerzan como controladores aéreos; o que puedan pasarse más de doscientos días al año fuera de casa navegando por todos los mares o en despliegues para garantizar la seguridad y la defensa".
Tampoco atiende, a tenor con Asfaspro, a "la verdad incómoda de que un militar puede realizar en tan solo una semana la jornada laboral real que otros servidores públicos o los trabajadores en general tienen que cumplir en un mes".
Aunque la Subsecretaria trate de justificar "la negativa a la revisión de nuestro salario intentando confundir a los periodistas con valoraciones incompletas o sesgadas", dice la Asociación, "lo cierto es que la merecida equiparación salarial de policías y guardias civiles ha producido una situación incompresible porque cualquier recién egresado de esos cuerpos tiene ya un salario neto superior a un teniente o alférez de navío, a la práctica totalidad de los suboficiales y a toda la tropa y marinería de las Fuerzas Armadas".
Asfaspro concluye su denuncia rememorando las palabras que expresara en 2005 en el Congreso de los Diputados el entonces ministro de Defensa José Bono: "Hace falta dinero porque mientras una brigada del Ejército, con 21 años de servicio, cobre menos que un policía autonómico recién ingresado vamos por mal camino, aunque cambiemos de disco”.
A ver, que nos enteremos. ¿Antes estaban equiparados esos sueldos y ahora ya no? ¿O es que se acaban de dar cuenta?