La secretaria general en Melilla, Caridad Navarro, asegura que una de las cosas positivas que tiene el nuevo proceso es que “por primera vez” se puede reclamar. La secretaria general de CCOO Melilla, Caridad Navarro, afirmó, en un comunicado de prensa, que “precisamente, si algo tiene de positivo este nuevo modelo es que, por primera vez, se ha abierto un plazo de reclamaciones para que los ciudadanos afectados puedan canalizar sus quejas. Si alguien cree que debe reclamar puede y debe hacerlo, pero condenamos que se haga con violencia”. Y añadió que “el proceso ha sido el más transparente de los que ha habido hasta ahora”, al tiempo que ha reconoció el esfuerzo realizado por los trabajadores del SPEE para baremar a casi 2.000 desempleados preseleccionados por fecha de inscripción.
Sin embargo, quiso dejar claro que CCOO, en Comisión Ejecutiva del SPEE, votó en contra de este sistema de selección porque aún siendo un gran avance, que indiscutiblemente lo es, sigue siendo injusto puesto que se sigue basando en el sistema de preselección a través del SISPE, programa informático que ha demostrado sus deficiencias y que criba únicamente por la fecha de inscripción en el paro. Posteriormente, se valoran las cargas familiares y los meses de paro. Por lo que el sindicato advirtió que se seguirían cometiendo injusticias y así lo hizo constar en un escrito dirigido al Delegado de Gobierno en el mes de julio pasado.
Convocatoria pública
Y es que CCOO cree que no debe haber distinción entre puestos de trabajo para oferta genérica y puestos destinados a “grupos de exclusión social” y sigue abogando por un sistema de convocatoria pública con un baremo que valore de forma conjunta la antigüedad en el paro, la adecuación al puesto de trabajo, las cargas familiares y se discrimine positivamente otras causas de exclusión social.
Navarro subrayó la importancia de reservar parte de la jornada de los trabajadores contratados en estos Planes a la formación: bien sea formación específica relacionada con el puesto de trabajo o de formación general de algunas de las competencias básicas (competencia en comunicación lingüística, competencia matemática, competencia en el conocimiento y la interacción con el mundo físico, tratamiento de la información y competencia digital, competencia social y ciudadana, competencia para aprender a aprender y autonomía e iniciativa personal).
Esto facilitaría el incremento de su cualificación profesional, el acceso a la acreditación de competencias profesionales adquiridas a través de la experiencia laboral y otras vías de formación y la inserción e integración laboral en puestos de trabajo para los que actualmente no estarían cualificados.
Finalmente, conscientes de que los Planes de Empleo no son la solución a medio-largo plazo de la altísima tasa de desempleo de Melilla, CCOO exige a ambas administraciones tanto local como central colaboración y una mayor inversión pública en educación y en políticas dirigidas a generar empleo estable y de calidad. La creación del Consejo Económico y Social en Melilla puede ser sin duda, un buen instrumento para orientar estas políticas.