Los melillenses llevaron el control del partido hasta que llegó la expulsión de Chota.
El Melilla no fue capaz de vencer al colista del grupo, pero sumó un punto de su visita al terreno de juego del Yeclano en un encuentro igualado y muy trabado en el que las ocasiones de gol brillaron prácticamente por su ausencia a lo largo de los 90 minutos de juego.
El conjunto visitante dominó el encuentro hasta la expulsión de Chota en el ecuador del segundo período. A partir de ese momento, fue el conjunto murciano el que creyó más en sus posibilidades de victoria, aunque no pudo desarbolar a un Melilla muy bien plantado sobre el terreno de juego.
En el Municipal de la Constitución se presentó un viejo conocido como es Andrés García Tebar, antiguo entrenador del equipo de Yecla y que, por tanto, conocía a la perfección las dimensiones del terreno de juego.
Planteó un encuentro táctico, en el que el Melilla supo llevar el tempo del partido. Por el contrario, el conjunto local esperó atrás, con poco poderío ofensivo por el planteamiento algo conservador con el que salió el técnico local.
Los murcianos entregaron el balón al Melilla, a la vez que trataron de ahogarles en el centro del campo. Hubo que esperar hasta el minuto 20 del primer tiempo para ver el primer acercamiento con cierto peligro.
Fue el Melilla el que se pudo adelantar en el marcador, en una buena triangulación, que no llegó a rematar Chota por centímetros. A los pocos minutos el centrocampista local Cano probó fortuna, pero su lanzamiento no consiguió sorprender al portero local.
El partido era igualado, pero siguió siendo excesivamente táctico y muy poco vistoso para el espectador. Llegaría una nueva oportunidad del Melilla en el minuto 38 y Chota, sólo, tras una larga carrera, disparó cruzado, pero el central local San José se interpuso y pudo desviar el balón.
Concluyeron los primeros 45 minutos con muy pocas ocasiones de gol y con el resultado inicial de empate a cero campeando en el marcador.
Sandroni tenía el dilema de arriesgar para tratar de llevarse el partido, pero si lo hacía lo más seguro es que un bien asentado Melilla le podría causar muchos problemas en la zaga.
Comenzó mejor nuevamente el conjunto visitante y Chota seguía creando mucho peligro cada vez que entraba en contacto con el balón. Al técnico local no le gustaba lo que veía y decidió jugársela metiendo a dos delanteros en el minuto 61. Al Yeclano le tocaba arriesgar e ir hacia arriba tratando de buscar los tres puntos en liza.
El encuentro se estaba cargando de tarjetas y continuaba el juego trabado. En el minuto 67, Chota fue expulsado, tras ver su segunda cartulina amarilla. Con un hombre menos, cambió el planteamiento del Melilla. Sandroni sacó a Pablo, otro delantero, que acaba de superar una lesión, viendo que el partido era factible tras la expulsión del delantero del equipo visitante.
En los 30 primeros minutos de la segunda parte pasaron bastantes cosas, cambios, expulsiones, nervios, pero las ocasiones de gol seguían brillando por su ausencia.
El tiempo se iba agotando y cada vez era más factible un empate sin goles. A escasos minutos del final llegó la mejor ocasión de todo el partido para el Yeclano, pero Biri mandó el balón por encima del travesaño ante la desesperación de la hinchada local que veía como el equipo acumulaba otra jornada sin llevarse los tres puntos.
Finalmente, la UD Melilla volvió de Yecla con un punto más en su casillero, pero sigue con la asignatura pendiente de ganar a domicilio, ya que cosechó una derrota y cuatro empates de sus cinco desplazamientos,