Melilla celebró este fin de semana el Día de las Aves con un anillamiento científico organizado por el grupo local de SEO Birdlife. La actividad se llevó a cabo en el Parque Forestal Juan Carlos I en dos jornadas, en sábado y domingo, desde las 8:00 horas hasta cerca del medio día.
Este fue el primer anillamiento propio de la ciudad desde que cuenta con un anillador local, Francisco José Pérez Ruiz, quien también es coordinador del grupo melillense de SEO Birdlife. Hasta este momento Melilla no contaba con anilladores locales y siempre tenía que contar con apoyo externo, lo que siempre ha conllevado también costes añadidos y contar en pocas ocasiones con este tipo de actividades de carácter científico.
La ciudad era uno de los pocos territorios que no tenían anilladores locales y contar uno propio supone un hito ya que podrán hacerse este tipo de estudios, no solo en eventos y fechas señaladas como el Día de las Aves, sino de forma continuada. Pérez Ruiz explicó a El Faro, que esto permitirá arrojar datos de carácter científico sobre las aves de Melilla, tanto a nivel nacional como internacional. Y esto permitirá también poner el nombre de la ciudad en el mapa.
"Es muy importante que ahora empiece a estudiarse nuestra avifauna, porque se puede extender a parte de nuestro medio ambiente, y a hacer diferentes medidas de protección basadas en los resultados", aseveró.
El anillamiento es un proceso por el cual se capturan los pájaros, se les toma una serie de medidas biométricas cuya finalidad es colocar en las aves una anilla metálica en la pata con un número asociado, "como si fuera un DNI". Posteriormente, todos esos datos formarán parte de una base de datos internacional a fin de que puedan ser utilizados en diferentes estudios y proyectos de carácter científico.
Francisco José Pérez Ruiz comentó también cómo marchó la jornada de este domingo e indicó que no se produjo "un gran éxito con las aves", porque se cazaron pocos ejemplares, aunque este hecho no restó en calidad. Entre otros animales pudieron coger un papamoscas gris, que es un ave migratoria, y pudieron concretar por alguno de sus rasgos científicos que precisamente se encontraba en migración.
"Además, al contar con pocas aves hemos podido detenernos tranquilamente en cada una y explicarla lentamente, apoyándonos en guías y en la observación directa, a todos los participantes", explicó. La asistencia sí fue cuantiosa, señaló el anillador indicando que la actividad tuvo una buena acogida por el público. "Nos hemos podido entretener y recrear con los animales que hemos cogido", dijo.
Otros proyectos
Pérez Ruiz afirmó que se está coordinando desde Melilla un proyecto relacionado con especies como el gorrión en el que participarán otras localidades como Ceuta, Almería, Málaga o Murcia. Con este proyecto se pretenden encontrar por medio de anillamientos las diferencias en cuanto a las medidas biométricas de los gorriones locales con comparación con los de la península.
Además del componente social de las acciones como las de este fin de semana, con el que todos los asistentes disfrutan tanto de al propia actividad como de nuestro medio ambiente de forma más cercana, lo que se hace es un trabajo de carácter más científico que es "extremadamente más importante para empezar a tratar nuestro medio ambiente". "No solamente con el respeto que se merece, sino para valorarlo gracias a la gran riqueza con la que contamos", concluyó.