Para la secretaria de Organización de UGT Melilla, la reforma “impuesta” por el Gobierno es la del despido y no la del empleo. La secretaria de Organización de UGT-Melilla, Concha López, manifestó ayer, en referencia a la reforma labora que “de ésta, no se salva nadie”. Así, dijo que “la reforma laboral, impuesta por el Gobierno consagra una cultura empresarial que apuesta por la rescisión del contrato, en lugar de buscar fórmulas alternativas, por lo que no sólo no va a evitar los despidos –como asegura el presidente del Gobierno– si no que va a producir el efecto contrario. Por eso la calificó como “la reforma del despido y no la reforma del empleo”.
López indicó también que esta reforma constata “la ruptura laboral del Gobierno, no sólo con lo que defendía hace poco tiempo, sino con la sociedad española”.
La dirigente ugetista señalóque “de esta ruptura laboral no se salva nadie pues supondrá más flexibilidad en el mercado laboral y un despido más fácil, barato y ultrarrápido” y como ejemplo indicó que “se contempla el despido exprés para los contratos de fomento del empleo”. Además, y según su opinión, “en España se puede producir una gigantesca operación de sustitución de trabajadores en edad madura, familiarizados con su puesto de trabajo, por trabajadores con contratos más baratos y unas condiciones laborales peores”.
Por otro lado, tal y como puso de manifiesto, “se consagra la dualidad en el mercado laboral y se agrede a la negociación colectiva, hasta tal extremo que uno de los firmantes del manifiesto de los 100, en su blog, cuando leyó el artículo que habla sobre el descuelgue salarial dijo que era una verdadera revolución”.
López explica que “lo que se ha hecho ha sido desplazar la incorporación del descuelgue del convenio del sector al convenio de la empresa, de manera tal que, “ahora es el empresario el que, por un determinado procedimiento, podrá llevar a cabo el descuelgue salarial de su empresa. Esto supone un golpe a la negociación colectiva y, en cierta medida, a la leal competencia entre las empresas”, apuntó.
La secretaria de Organización de UGT-Melilla confirmó que la “imposición” de esta ruptura laboral “ha hecho que la Huelga General del 29 de septiembre sea inevitable. Una huelga muy necesaria y muy legítima, que es un acto de afirmación constitucional”, afirmó. Además, y según señaló, “queremos que se rectifiquen las decisiones que se han adoptado pero también queremos evitar decisiones como la que se pretende sacar adelante en relación con el retraso de la edad de jubilación de los 65 a los 67 años. Decisiones que agravarían los problemas de nuestro mercado laboral”.
La huelga general de 29 de septiembre se enmarca en la jornada de acción sindical a nivel europeo que tendrá lugar ese mismo día, bajo el lema ‘No a la austeridad. Sí al crecimiento económico y al empleo’. “Esa palabra, austeridad, aunque suena bien y es políticamente correcta, lo que esconde son muchos sacrificios para los que no son culpables de la crisis y la protección y el beneficio de las Administraciones Públicas a los que la han provocado”, concluyó la dirigente sindicalista.