Ante la incertidumbre generada respecto a la apertura de la frontera durante este fin de semana, la noche de este domingo unas 300 personas se acercaron a Beni Enzar para intentar cruzar a Marruecos donde tienen su domicilio, pero no se les permitió el paso ya que permanece cerrado por la crisis del coronavirus.
Debido a que estas personas carecían de un lugar en la ciudad al que regresar para pernoctar, la CAM los reubicó en distintos centros en Melilla.
El consejero de Políticas Sociales, Mohamed Mohamed Mohand, informó de que estas personas no estaban siendo acogidos en ninguno de los centros habilitados en la ciudad, ni en el cementerio musulmán, ni en la Plaza de Toros ni tampoco en el Vº Pino, por lo que se presume que habrían estado alojados durante estos dos meses, desde que se cerró la frontera, en domicilios privados.
Al paso fronterizo de Beni Enzar se acercaron junto al consejero de Políticas Sociales, la delegada del Gobierno, Sabrina Moh; la vicepresidenta primera del Gobierno local, Gloria Rojas y el director territorial del Ingesa, Omar Haouari.
Como se ha hecho en los últimos operativos de seguridad en la frontera durante la repatriación de 200 marroquíes atrapados en Melilla, la Policía comenzó a tomar los datos de estas personas para hacer un listado completo de todos los ciudadanos quieren cruzar a Marruecos.
“Hay personas que en el momento en que se les estaba afiliando nos hacían llegar que no tenían a donde volver”, dijo el consejero, quien comunicó que debían regresar a las viviendas donde han pernoctado durante estos dos meses.
“Por lo que se ve, había gente que estaba o bien con familiares o eran empleadas de hogar que estaban en sus respectivos puestos de trabajo o en los domicilios donde prestan los servicios y que ya no les dejan volver”, explicó Mohand a la vez que informaba de que reubicarían a estas personas para que pasaran la noche resguardadas bajo techo.
Explicó que lo harían en los distintos centros de la ciudad, principalmente a la Plaza de Toros, ya que en su mayoría quienes acudieron a Beni Enzar este domingo son mujeres y personas mayores.
“No íbamos a permitir que se quedasen en la calle a pasar la noche y los acogeremos en lo que dura la investigación por parte de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad”, para conocer dónde se encontraban viviendo estas personas durante los dos meses de confinamiento y estado de alarma, así como el porqué no pueden volver a esos hogares.
Repatriación a Marruecos
El pasado viernes, Rabat comunicó la repatriación de 200 personas que se encontraban atrapadas en Melilla. Ese día, al paso fronterizo de Beni Enzar acudieron decenas de personas, con niños y familias que tenían la esperanza de volver a su país. Los agentes, que formaban parte del dispositivo de seguridad, tomaron nota de los datos marroquíes que no podían cruzar la frontera por no estar en el listado de personas que envió Marruecos.
El viernes cruzaron la frontera unas 130 personas, aproximadamente, y el sábado culminó el proceso de repatriación de unas 70 personas para alcanzar las 200.
El presidente de la Ciudad, Eduardo de Castro, informó este domingo que algunas de las personas repatriadas estaban en los espacios habilitados por la Ciudad para acoger a los marroquíes atrapados en Melilla, pero aún permanecía un número importante de personas tanto en el Vº Pino como en la Plaza de Toros.