El presidente de Melilla, Eduardo de Castro se reunió ayer con el Rey Felipe VI, cerrando así este último las ronda de entrevistas con los representantes autonómicos.
Durante más de hora y media, el jefe del Ejecutivo local departió en el Palacio de la Zarzuela con Su Majestad, abordando los principales asuntos que atañen a nuestra ciudad.
La reunión, que mantuvo un tono afable y cordial, tocó los principales problemas que achacan a Melilla y el Rey mostró su interés y preocupación por el tema de la inmigración, un asunto que afecta a Melilla más que a otras regiones.
Tras el encuentro, De Castro informó de la invitación que había hecho a Felipe VI para que este visite la ciudad, un ofrecimiento que el monarca recibió con interés. Según el presidente, el Rey intentará viajar a nuestra ciudad cuando pueda cuadrar su apretada agenda.
El viaje de Felipe VI sería bueno para la ciudad. La lejanía del resto del país a veces crea la sensación de que en Melilla estamos solos y la visita del jefe del Estado sería un bálsamo y un recuerdo para que los melillenses no olvidemos que formamos parte de España y de que el resto de la nación no se olvida de nosotros.