–Marruecos no ha parado con sus restricciones. Ahora en Barrio Chino están marcando qué producto entra cada día.
–Efectivamente. Estamos viendo que cada día hay una demanda distinta. Recientemente nos llegó la información de que el producto nuevo de textil y calzado no se podía pasar. Pero de ahí se ha extendido a los frutos secos y las legumbres. Pero es que mañana no sabemos qué van a imponer en la frontera. Es ponernos a la orden de la demanda de Marruecos. Pero pensamos que no debería de ser así. Si Marruecos quiere rechazar algún tipo de mercancía deberían hacerlo las autoridades del país vecino.
Sin embargo, son los agentes españoles los que no permiten el paso. ¿Qué es lo que pasa? Pues que las autoridades españolas nos dicen que si dejan pasar a las personas con la mercancía que luego rechaza Marruecos se forma un embudo en el paso fronterizo. Pero esto tiene una fácil solución: dejemos pasar a las personas con las mercancías y si Marruecos las rechaza, pues que se habilite un carril para que vuelvan para ver que realmente son los marroquíes los que están impidiendo el paso de esa mercancía y no lo hace España.
–¿Se podría pactar con Marruecos, por escrito, qué mercancía puede o no pasar?
–Marruecos no va a entrar ahí. Las autoridades marroquíes van dando órdenes según la mercancía que entre en barco a su país o de lo que le interese traer. ¿Qué es lo que pasa con esto? Pues que si traen legumbres por barco no van a dejar que pasen por Melilla para no tener una competencia ‘desleal’ ahí. En este sentido, creemos que hay que llegar a un acuerdo con Marruecos pero global. Debe haber una relación de buena vecindad como ha habido todo este tiempo y que se respete el flujo de personas, como ha habido siempre. La idea es que Nador y Melilla convivan como lo han hecho siempre.
–También hay problemas para el paso de mercancías de vehículos españoles en Farhana.
–Dentro de Marruecos se quejan de que las matrículas europeas pasan más veces que las de su país, puesto que el marroquí solo puede dar un viaje porque se pone en cola y hay varios problemas siempre para llegar al otro lado de la frontera de Farhana. Estaban viendo que los coches europeos, al contar con su carril especial, pueden pasar más veces. Los que transportan mercancías se quejaron a las autoridades marroquíes y Marruecos protege a su gente con esta medida de impedir el paso de los coches europeos. Ahora la situación está mejor y sí permiten el paso de los españoles con mercancía.
–¿Qué solución propone para reabrir la aduana comercial?
–Lo primero que tiene que hacer el Gobierno central es que, aunque en Melilla haya 80.000 habitantes, es una población muy importante y tiene que poner el problema sobre la mesa. Que nosotros sepamos el cierre de la aduana comercial no está en el debate del Gobierno central.
Los valores de convivencia entre la gente de Melilla y Marruecos deben prevalecer por encima de todo. El Gobierno local de Melilla podría también entablar conversación con su homólogo en Nador e ir solucionando cosillas pequeñas que siempre se han solucionado a nivel local. Eso no se está haciendo.
Marruecos poco a poco va cerrando su frontera y limitando nuestro desarrollo.
Están en su derecho, aunque sea mala vecindad y poca amistad preferente.
Per y nosotros? Melilla después de 30 años acostumbrados a mirarnos el ombligo y hablar de sexo de los Angeles, entiéndase Cordero de España o cordero de Marruecos. Seguimos sin soluciones
Por qué?....
poco a poco hasta que no entra ni una mosca...