El contrato de limpieza urbana y recogida de residuos, el más importante de cuantos adjudica la Ciudad, empezará con dos meses de retraso por el recurso presentado por la empresa que gestiona el servicio en la actualidad, que ha quedado segunda en el concurso, y a la que no le han dado la razón. Uno de los requisitos de este nuevo pliego era la contratación de 50 pesonas más.
En rueda de prensa, el consejero de Coordinación y Medio Ambiente, Manuel Ángel Quevedo, ha explicado que el Tribunal Central de Recursos Contractuales ha dado la razón a la Ciudad frente al recurso presentado por la empresa UTE FCC-Urbaser, que consideraba que no se había puntuado bien la parte técnica en la baremación.
Quevedo ha mostrado su satisfacción por esta "victoria sin paliativos" de la Ciudad frente al recurso, pero ha lamentado que se haya convertido en "algo habitual" que las empresas que quedan en segundo puesto acudan al Tribunal Central de Recursos Contractuales "para ver qué pasa".
En este caso, ha apuntado que el único efecto del recurso ha sido el retraso de dos meses de este nuevo contrato, que recoge importantes mejoras en cuanto a los recursos técnicos y humanos en el servicio de limpieza, que en lugar de empezar el 15 de abril, como estaba previsto, lo hará a mediados de junio.
Asimismo, ha señalado que la Ciudad Autónoma no se plantea la posibilidad de sancionar a la empresa FCC-Urbaser por este recurso, a pesar de que le parecía "discutible" porque obligaba a prorrogarle el contrato vigente en la actualidad durante dos meses, con un coste de unos 950.000 euros mensuales.
Al hilo, el consejero ha apuntado que el 13 de junio entrará en vigor el contrato de mantenimiento de zonas verdes, que llevará aparejado un aumento de diez plazas en la plantilla a jornada completa, por lo que unidas a la ampliación de personal en el contrato de limpieza, ha subrayado que el mes que viene un número importante de melillenses podrán acceder a un puesto de trabajo