El PSOE critica la contratación por más de 20.000 euros de un presentador externo a Televisión Melilla (TVM) para un programa de entrevistas de aproximadamente media hora de duración, según indicó ayer, en rueda de prensa, la portavoz del grupo socialista en la Asamblea de Melilla, Gloria Rojas.
Así indicó que desde su formación tienen la sospecha de que lo que se esconde detrás de esta colocación no es sino "el propósito del PP de contratar a ciertas personas de una forma encubierta e indirecta".
Además Rojas lamentó que con la contratación de personal externo no se "valora" a los propios profesionales de la televisión pública de la ciudad. "No entendemos cómo desde la dirección de Inmusa (sociedad pública que sostiene Televisión Melilla) se puede negar a la realización de esta actividad a profesionales de este ente público con muchos años de experiencia y de reconocido prestigio y, sin embargo, se pague con dinero público a una persona externa a Inmusa", dijo Rojas.
En este sentido, indicó que su partido sabe que hay profesionales de "sobrada experiencia" y "contrastada calidad", que han trasladado a la dirección de Inmusa que están dispuestos a hacer este espacio de entrevistas y otros programas. "Algo que saldría a coste cero para las arcas públicas porque son trabajadores que ya están en plantilla de Televisión Melilla", señaló.
Afirmó que el pago del programa "no tiene sentido", más aún si se tiene en cuenta, según la portavoz del PSOE, que Televisión Melilla va a poner sus recursos humanos y técnicos para la producción, grabación y postproducción de los programas y, sin embargo, la propia entrevista será realizada por una persona externa a la plantilla, a la que se le va pagar "casi 400 euros por programa".
El pago de más de 20.000 euros a un periodista ajeno a la plantilla del ente público fue aprobada la semana pasada en el consejo de administración de Inmusa, con el voto a favor de PP y PPL y el voto en contra de PSOE, CpM y Cs.
Contratos abiertos
Durante su intervención también explicó que los socialistas han planteado que Inmusa abra los contratos menores para que participen todas las empresas que lo deseen. "Si abrimos la posibilidad a que todas ellas concurran, no sólo eliminamos cualquier suspicacia sobre porqué se avisa a unas en detrimento de otras, sino que tratamos en pié de igualdad a todas ellas", señaló. Pero además, "es una medida que también es ventajosa para la propia Inmusa, porque al haber más competencia, lo más seguro es que haya mayor número de ofertas competitivas y eso se traduzca en un gasto menos", dijo.