El propietario de un locutorio ha sido puesto a disposición judicial por presuntamente comprar el terminal de un menor que lo sustrajo.
La Guardia Civil ha recuperado un teléfono móvil que fue sustraido el pasado cuatro de julio en la playa de San Lorenzo. Según indican desde la Comandancia en comunicado de prensa, mientras el propietario del terminal se daba un baño, un menor de 15 años se llevó sus pertenencias.
Las pesquisas realizadas por la Benemérita concluyeron que el presunto autor de un delito de hurto llevó el dispositivo a un locutorio de la ciudad, donde lo vendió. Por ello, el Cuerpo ha puesto a disposición judicial al dueño de este establecimiento, un melillense de 29 años, y ha llevado ante la Fiscalía de Menores al supuesto autor del hurto.
La víctima cuyo teléfono ha sido recuperado es un chico de 16 años residente en Melilla. El móvil es un smartphone marca Huawei modelo P9 Lite.