El local de la Mezquita central alquilado y que supuestamente ha provocado el cierre de un pasillo de acceso a la sala de rezo del centro de culto, que además era una salida de emergencia, volvió a saltar a la actualidad ayer. El presidente de Coalición por Melilla (CpM), Mustafa Aberchán, hizo referencia a la inversión que se va a hacer en la Iglesia de La Purísima para paliar los daños del terremoto. Celebró que la Ciudad se preocupe por su patrimonio, pero resaltó que la Mezquita también “es de todos” y consideró que los ingresos que obtendría la Administración por el alquiler son insignificantes.
La consejera de Economía, Esther Donoso, aseguró que está pendiente de un informe de Fomento para decidir qué se hace con este asunto. El presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, también quiso intervenir en el asunto y aseguró que sin lugar a ninguna duda se va a respetar cualquier medida de seguridad.
Aberchán insistió en la necesidad de que el Ejecutivo local no permita que se cierre este paso de un edificio patrimonio de todos.