El fuerte viento tumbó dos antenas, una de Bomberos y otra en el Barrio de la Victoria
Casi se quedan sin comunicaciones y sin poder recibir ni una llamada. Pero hicieron “un apaño” y lograron que el teléfono continuara funcionando. La antena que permite al 112 y Bomberos recibir las llamadas y tener sistemas para comunicarse entre ellos y otros cuerpos, como la Policía Local, fue derribada ayer por el fuente viento. Se dobló por la mitad y menos mal que pudieron mantener la conexión, porque en caso contrario, no hubieran tenido cómo recibir los avisos de los melillenses.
Los Bomberos explicaron a El Faro que tiraron adelante con un “apaño” que realizaron en la antena. Hoy la repararán porque bajo ningún concepto se pueden quedar sin comunicación.
Creen que ha sido el desgaste del tiempo y la meteorología lo que llevó a esta torreta a ceder y doblarse en su base. Afirman que es de hierro y con el desgaste de la lluvia, el viento de ayer terminó por caer esta antena.
De hecho, entre las 9:00 y las 20:00 horas de ayer se llegaron a registrar rachas de viento de entre 48 y 49 kilómetros por hora, siendo la más fuertes de 63 kilómetros por hora a las 14:00 del mediodía.
También tuvieron que realizar otra salida por la mañana para evitar que cayera una antena grande de un piso en la calle Las Navas, en el barrio de la Victoria. Varios vecinos engancharon sus antenas a una estructura y ésta estaba medio derruida.
Por otro lado, un vigilante de seguridad del Parque Hernández dio el aviso a Bomberos para que acordonaran una zona de este espacio verde. Una de las palmeras más grandes estaba casi doblada y con cada racha de viento fuerte se tumbaba más. El temor de dicho vigilante era que cayera sobre algún ciudadano. Entre él y un bombero acordonaron la zona. Aunque indicaron que si el peligro hubiera sido mayor se habría cerrado el parque.