Después de disfrutar de la habitual jornada de descanso de los martes, la plantilla de la Unión Deportiva Melilla retomaba ayer los entrenamientos y lo hacía en una doble sesión en el campo del Álvarez Claro.
Por la mañana y bajo la dirección del primer entrenador, Fernando Currás, los integrantes del plantel unionista completaron un trabajo específico que consistió en la realización de una serie de rondos como antesala a la disputa de partidos de fútbol a medio campo con determinadas premisas tácticas. La sesión de prolongó por espacio de unos 80 minutos.
Ya por la tarde, los azulinos volvieron a vestirse de corto para llevar a cabo un entrenamiento de fuerza, además de disputar un mundialito con varios partidos de fútbol en espacio reducido.
Enfermería
En cuanto al estado de la enfermería unionista, cabe significar que Manolo sigue progresando de manera favorable de la luxación que sufrió en el hombro izquierdo durante el partido de Copa del Rey disputado el pasado 2 de septiembre ante el Algeciras CF.
Por otra parte, Diego Cascón arrastra unas molestias en los tobillos que en principio no le impedirían ser de la partida ante el filial bético.
El delantero leonés está a la espera de recibir unas plantillas especiales de cara a intentar minimizar dicho contratiempo.
El equipo volverá a ejercitarse hoy en sesión de tarde, con motivo de la celebración de la festividad del Aid El Kebir. La escuadra azulina completará un entrenamiento técnico táctico en el que a buen seguro el técnico Fernando Currás trabajará junto a sus hombres la manera de doblegar a un rival como el Betis B, que llega al Municipal Álvarez Claro situado en puestos de descenso directo con un punto más que los azulinos y con el objetivo de enderezar su trayectoria en la liga.