El técnico de la Peña Barcelonista manifiesta que repetiría la experiencia a la hora de trabajar para un club como el que preside Javi Martínez.
La Peña Barcelonista acabó su andadura en la División de Honor de Juveniles hace apenas diez días. No ha sido una temporada fácil para un equipo que consiguió el ascenso a la máxima categoría del fútbol juvenil tras quedar campeón en la liga local, pero la experiencia ha sido más que positiva al menos de cara a la formación de los deportistas melillenses independientemente de la clasificación final.
Felipe Sánchez valoró para El Faro el curso recién acabado. “La Temporada ha sido agónica en cuestión de resultados. Si bien, ha sido bastante positiva en cuanto al trabajo diario con los chavales, ya que no es fácil acabar prácticamente con el mismo grupo de jugadores con el que empecé a trabajar”, manifestó el técnico blaugrana quien añadió que “no hemos dado el nivel exigido. A nadie le gusta perder la categoría, pero éramos conscientes de la dificultad del reto. Hemos trabajado para el club y las sensaciones han sido buenas. Los niños han alcanzado cierta madurez en una competición muy exigente en la que la mitad de los equipos está formado por futuros jugadores de la élite del fútbol español”.
La progresión de la Peña fue evidente conforme pasaban las jornadas, llegando a competir de tú a tú ante rivales en teoría superiores, sobre todo en los partidos disputados en La Espiguera. “El equipo en casa se ha mostrado más fiable y organizado, ha dado la talla ante equipos importantes. Ha habido fases a lo largo de la temporada en la que hemos estado incluso por encima de algunos equipos con más experiencia en la categoría como Los Molinos, y otros de nuestro nivel como el Sanluqueño o el Goyu Ryu. Quizá el último tramo del campeonato no ha sido el que esperábamos, pero hay que comprender que los chavales tienen que atender también a sus estudios y eso les hace no tener la regularidad deseada en cuanto a asistencias a las sesiones de entrenamientos”, argumentó el preparador melillense.
“Tienen mérito que el grupo haya seguido unido a pesar de verte inmerso en la parte baja de la clasificación. Fuera de casa hemos bajado el rendimiento, pero no por arrojar la toalla sino porque no hemos dado el nivel necesario para puntuar en campo contrario”, apuntó Sánchez.
Además de lo que significa el competir en un campeonato del nivel del Grupo IV de la División de Honor de juveniles, el entrenador azulgrana saca varias conclusiones: “Está claro que no se llega al nivel en una liga en la que compiten hasta siete u ocho equipos filiales de Primera y Segunda División. Ahora bien, en cuanto al tema de implantar valores a estos chavales jóvenes ha sido positivo. En algunos casos muy favorables, aunque en otros no tanto”, reconoció Felipe Sánchez.
El entrenador de la Peña Barcelonista tiene la sensación de que se ha hecho un buen trabajo, sobre todo de cara al futuro. “Hemos trabajado con chavales muy jóvenes. De hecho, el club podrá contar la próxima temporada con catorce o quince jugadores que ya saben lo que es competir en categoría nacional. Unos con más minutos acumulados y otro con menos, pero a nivel formativo cuentan con una experiencia que no tienen otros. Eso es motivo de satisfacción a nivel personal”, expresó.
Futuro
Felipe no quiso manifestarse en cuanto a planes de futuro, pero deja claro que se ha encontrado muy a gusto en el club que preside Javi Martínez. “En principio el club no se ha manifestado al respecto de seguir en el proyecto, pero yo sí le he transmitido mi agradecimiento porque he estado muy a gusto. En esto del fútbol ya se sabe, aunque si se da el caso estaría encantado de seguir en el club. Todo han sido facilidades para realizar mi labor”, expresó el técnico melillense.
En cuanto a si en la ciudad hay nivel suficiente para competir en División de Honor, Felipe Sánchez apuntó que: “Lo ideal sería hacer una selección de jugadores en los que impere unos valores. Es una competición formada por dieciséis equipo de los que seis descienden. Creo que se podría competir, porque al margen de los seis o siete filiales que cuentan con una plantilla de un nivel alto, el resto estaría algo más parejo para intentar conseguir la permanencia. Recomendaría la experiencia. Ha ido magnífica para los que han competido y no sería justo que otro equipos no tuvieran esa oportunidad”, concluyó.