La ministra dice que la gestión de su departamento ha sido en siempre “trasparente”
La ministra de Fomento, Ana Pastor, defendió ayer, durante su intervención en la sesión plenaria celebrada en el Senado, la “transparencia y honradez” de su departamento en la contratación y licitación de obras públicas y concretamente en el último concurso para cubrir la conexión entre Melilla y la península por vía marítima.
Así se pronunció la titular de Fomento ante una pregunta del senador del PSOE, Juan Manuel Fernández, sobre la valoración del Gobierno central de las ofertas económicas presentadas en el último concurso para cubrir la conexión entre Melilla y la península por vía marítima, una cuestión que en opinión del socialista “huele mal”.
Pastor destacó que el Gobierno tiene como objetivo adecuar la movilidad de todos los territorios extrapeninsulares y recordó que en el caso de Melilla ha destinado esta legislatura 83 millones de euros.
La ministra de Fomento detalló que entre 2012 y 2014 el Gobierno ha subvencionado el 50% del importe de casi 1,2 millones de billetes de transporte aéreo y marítimo de residentes en nuestra ciudad.
Tras indicar que se ha aplicado la normativa vigente, la ministra resaltó que el Gobierno garantiza la movilidad de los melillenses, entre Melilla y Málaga y entre Melilla y Almería.
Ante las acusaciones del senador socialista sobre la dudosa legalidad de los concursos, Pastora aseguró que su departamento actúa con transparencia y honradez, y que son las mesas de contratación las que adjudican las obras de carácter público.
La ministra detalló que en el caso del último concurso para cubrir la conexión entre Melilla y la península se ha licitado por 12,5 millones de euros anuales y que al mismo se han presentado tres empresas.
Pastor acusó al PSOE de defender los intereses de las empresas más que los de los ciudadanos.
Por su parte, el senador socialista reprochó a la ministra una gestión “ridícula” en este campo e insistió en que el concurso para interconectar Melilla con la península “huele mal”.
Hay que recordar que Marina Mercante está analizando las justificaciones de las ofertas económicas presentadas por las navieras a este tercer concurso para la adjudicación del contrato marítimo de nuestra ciudad (los dos anteriores quedaron desiertos). Las ofertas presentadas por las compañías marítimas (7,6 millones de euros Trasmediterránea, 14,1 millones de euros Balearia y 17 millones de euros Armas para dos años) fueron consideradas ‘bajas temerarias’, por lo que una auditora tendrá que ver si las empresas pueden justificar la rebaja antes de adjudicar el servicio.