4.824 personas se marcharon de la ciudad el año pasado y sólo llegaron 3.828
El crecimiento poblacional de Melilla se para a pesar de que sigue siendo la región con mayor tasa de natalidad del país. Si la semana pasada los datos del INE (Instituto Nacional de Estadística) demostraban que por primera vez desde 1999 habían descendido los nacimientos de niños en nuestra ciudad, ayer las cifras apuntaban que el número de personas que decidió irse a vivir fuera el año pasado fue superior al de ciudadanos que llegó a Melilla.
En concreto, el informe publicado ayer por el INE muestra que el año pasado se marchó de Melilla a otra región española o al extranjero un total de 4.824 personas, mientras que la cifra de ciudadanos que se instaló en nuestra ciudad fue de 3.828. Es decir, en el capítulo migratorio Melilla perdió 996 habitantes entre enero y diciembre de 2013. El saldo migratorio, por lo tanto, fue negativo.
La consecuencia de este éxodo de personas es que, aunque el saldo vegetativo (el resultado de restar el número de muertes al número de nacimientos) fue positivo en nuestra ciudad el año pasado, en concreto, se registró un incremento de 1.045 personas, la marcha de ciudadanos hacía otros lugares provocó que el crecimiento poblacional definitivo fuera sólo de 50 personas. En concreto, el número de habitantes se quedó en 83.669, frente a los 83.619 del 2012.
Así, aunque Melilla sea una de las pocas regiones en las que la población aumentó el año pasado, el ritmo de crecimiento se ha frenado si lo comparamos con el de los últimos años. En 2011 en nuestra ciudad había 80.802, lo que supone que el número de habitantes se incrementó en casi 3.000 en sólo un año. Si se echa la vista un poco más atrás en el tiempo, se comprueba que desde el inicio de la crisis en 2007 la población de Melilla se ha incrementado en más de 14.000 personas. Sin embargo, a juzgar por los datos publicados ayer por el INE, parece que la tendencia ha comenzado a cambiar.
Los números ya apuntaban en esta dirección cuando el INE publicó las estimaciones de población del primer semestre del año. En aquel momento la cifra de residentes se quedó en 83.251, lo que supuso la primera reducción de habitantes del siglo XXI en nuestra ciudad. Finalmente, los datos definitivos del año pasado demuestran un incremento, pero muy ligero, en comparación a los que se han experimentado en los últimos años. En concreto, el aumento es de sólo el 0,06%.
La tendencia en el resto del país
En el conjunto del país, el número de habitantes se redujo un 0,47%. Sólo en Baleares (0,47%) y Canarias (0,46%), además de en Melilla, el 1 de enero de 2014 había más habitantes que un año antes.
Las cifras indican, en el caso de nuestra ciudad, que la mayoría de los ciudadanos eligió marcharse al extranjero. En concreto, el año pasado 2.609 personas se emigró a otro país. La mayoría eligió una nación de África (2.176), le siguieron los países de la Unión Europea (377). La mayor parte de las personas que se marchó no era de nacionalidad española. Esto apunta a que posiblemente los ciudadanos que emigraron habían sido años atrás inmigrantes que ahora ha decidido volver a sus países de origen.
En cuanto a la inmigración de personas que vivían en el extranjero, llegó a nuestra ciudad un total de 940. La mayoría también procedía de África (619). Además, regresaron 149 españoles que habían estado viviendo fuera.
Los datos del informe también hacen referencia a las migraciones interiores, es decir, los movimientos de población dentro de nuestro país. El año pasado se marchó de Melilla con destino a otra autonomía española un total de 2.215 personas y llegaron a nuestra ciudad 2.888. Andalucía fue tanto la región a la que más personas se marcharon (900), como la autonomía de las que más ciudadanos llegaron a nuestra ciudad (1.049).
En el conjunto del país, el 2013 cerró con un total de 46.507.760 habitantes, frente a los 46.727.890 de un año antes. La región que más población ha perdido en estos ocho meses es La Rioja, donde la cifra de residentes se ha reducido en un 1,20%. También hubo caídas por encima de la media en Aragón, Valencia, País Vasco, Galicia, Madrid, Asturias, Castilla-La Mancha, Castilla y León y Cataluña.