El sindicato dice que no creerá nada hasta que se ponga la primera piedra del Jardín Valenciano.
A estas alturas de la película el sindicato de enseñanza FETE-UGT de Melilla no se cree el rosario de promesas que dejó a su paso el ministro de Educación, José Ignacio Wert, durante la visita que realizó a la ciudad el pasado miércoles.
Según comentó ayer a El Faro la portavoz sindical, Dolores Jiménez García, hasta que no vean colocada la primera piedra del nuevo IES del Jardín Valenciano no creerán una sola palabra al ministro. “Llevamos diez años escuchando que van a construir ese instituto”, señaló.
Hay que recordar que Wert avanzó en Melilla que las obras del nuevo instituto del Jardín Valenciano comenzarán a primeros del año que viene.
FETE-UGT, al igual que hizo ayer el PSOE de Melilla, recriminó a Wert que no haya querido reunirse con representantes de los agentes sociales y de la comunidad docente de la ciudad. “Habría sido interesante que tuviera nuestra opinión sobre el sistema educativo”, recalcó.
En esta línea recordó que desde FETE-UGT reivindican la negociación colectiva y el diálogo social. “Venimos exigiendo que se convoque la Mesa General de Admisnitración Pública desde el año 2010”, comentó a El Faro.
Parcheo en Infantil
La secretaria de Enseñanza Pública y Acción Sindical de FETE-UGT en Melilla aprovechó además la visita del ministro a la ciudad para recordar que le parece “un parcheo” la habilitación de tres aulas de Infantil en la Casa de la Juventud porque cuando los niños que sean acogidos en ellas terminen la enseñanza Infantil no tendrán un centro de Primaria al que incorporarse.
En esta línea, también lamentó que Wert no haya dado fecha de inicio de las obras del colegio Gabriel de Morales. Por eso le parece absurdo que el ministro de Educación hable de reducir el número de alumnos por clases si las infraestructuras prometidas a Melilla continúan retrasándose.
Tampoco encajó muy bien la portavoz de FETE-UGT la promesa del ministro de que habrá más personal docente el próximo curso. “Espero que sea cierto porque han dicho que los cupos serán iguales a los de este curso”, dijo.
Lo ideal, concluyó, “es que los profesores tengamos entre 25 y 26 niños por aula y los podamos atender de forma holgada”.