Vox Melilla ha presentado cinco preguntas para el Pleno de control de la próxima semana, entre las cuales destacan el problema de la mala canalización de las lluvias, los casos de rabia y la situación de las obras de la calle Ibáñez Marín.
Con respecto al tema de las inundaciones, la formación local quiere saber “qué medidas piensa llevar a cabo el Gobierno para que no se vuelva a paralizar la ciudad cada vez que se producen lluvias, como ocurrió el pasado cinco de abril”.
Mientras, su preocupación en el campo sanitario se vincula con la estrategia para evitar la expansión de la rabia, “teniendo en cuenta que nos encontramos con cinco casos (de esta enfermedad) en la ciudad”.
La formación dirigida por Tasende también ha inquirido al Ejecutivo sobre la demora y los desperfectos de las obras de la calle Ibáñez Marín, toda vez que “lo construido ha resultado quedar en una especie de acerado musical en que las losas se levantan al pisarlas”.
Otra de las interrogantes tiene que ver con los voluntarios de Protección Civil, quienes llevan sin ser activados desde la pandemia y constituyen “un colectivo que creemos que hace mucha falta en situaciones como el último temporal vivido o en eventos que se desarrollen en la ciudad, tales como los deportivos”.
Por último, Vox Melilla ha instado a la Ciudad Autónoma “a cumplir la sentencia que obliga a revisar ciertos expedientes en relación con unas posibles infracciones urbanísticas”.
El partido melillense insiste en su reclamo de “saber qué acciones va a llevar a cabo el Ejecutivo para mejorar la situación de la ciudad”, espera que el Gobierno ofrezca respuesta “a todas las preguntas presentadas”, y garantiza que “siempre estaremos luchando para que la ciudad sea su mejor versión posible y así dar a los ciudadanos la Melilla que se merecen”.