Vox Melilla vuelve a insistir en la urgencia de reforzar la seguridad de las fronteras, después de que en solo un fin de semana y apenas a nueve días de empezar este 2022, hayan arribado a la ciudad más de treinta inmigrantes ilegales.
A los constantes asaltos al vallado fronterizo, dice Vox, se suma ahora la llegada a Melilla de decenas de personas en dos pateras. La primera, desembarcó en la ciudad el pasado viernes con 13 personas. Mientras que el domingo, llegaron 19 inmigrantes ilegales a la playa de la Alcazaba en una embarcación de recreo.
Aunque "las vías de entrada y el número de asaltantes son cada vez más", "las medidas preventivas y de contención cada vez son menos", lamenta Vox Melilla.
De hecho, la formación dirigida por José Miguel Tasende tiene claro que las grandes peticiones de asilo con final positivo de los miles de inmigrantes ilegales que se encuentran en la ciudad se están "convirtiendo en un refuerzo del efecto llamada".
La vicesecretaria de Organización de Vox Melilla, Carmen Merino, pregunta si el Gobierno "pretende solucionar este efecto llamada y qué hará para evitar la libre circulación de inmigrantes por el resto del país".
En palabras de Merino, "el ingente número de inmigrantes que, día tras día, ilícitamente desembarca en nuestras costas implica que, de urgencia, el Gobierno central junto con cada Ejecutivo local debe adoptar cualquier medida que resulte necesaria para tratar de paliar esta problemática".
Además, desde Vox resaltan que "el Ejecutivo socialcomunista sigue tratando a Marruecos como un país vecino, amigo y socio estratégico de gran importancia, cuando en realidad este mal llamado amigo es uno de los principales problemas a los que se enfrenta España".
Estas últimas llegadas ilegales, de acuerdo con Vox, no hacen más que "seguir con la estrategia híbrida que planea Marruecos sobre Ceuta y Melilla".