Francisco Villena, viceconsejero del Gobierno melillense, tendrá un plazo de diez días para presentar alegaciones ante la Mesa de la Asamblea, que ha dado trámite así a la petición de reprobación formulada por el diputado de Somos Melilla, Amín Azmani. Éste acusa a Villena de "insultar" a los ciudadanos en las redes sociales.
"La Mesa de la Asamblea acuerda, antes de tomar una decisión, poner de manifiesto el expediente al diputado Villena para que, en un plazo máximo de diez días, pueda examinarlo y aportar los elementos de hecho acompañando los documentos y justificaciones que estimen pertinente, así como efectuar las alegaciones de derecho que convengan en su defensa", dice textualmente la resolución adoptada por este órgano en su reunión del pasado jueves.
Azmani había solicitado la aplicación del Reglamento de la Asamblea y la reprobación de Francisco Villena por supuesta "conducta inapropiada". Como prueba, el líder de Somos Melilla aportó fotocopias de comentarios realizados en diferentes redes sociales por parte de Villena, así como otras personas.
Villena dejó claro en una entrevista con El Faro que él solo sale en defensa de fuertes críticas a miembros del Gobierno e incluso de sus familias, algo que, según dijo, no podía consentir. Además, explicó que el objetivo de sus denuncias en las redes sociales es sacar de la política a "personajes como Azmani", al que acusó de "hipocresía" por tratar de "aparecer como pulcro" en la vida pública y, sin embargo, tener otras actitudes personales.
Se refería con ello a sus críticas, por ejemplo, a los ágapes que ha organizado el Gobierno en alguna ocasión "cuando era el primero en la mesa comiendo" o sus señalamientos al personal de confianza "cuando él lo era del PSOE", además de recordar que en su momento era el secretario general de las Juventudes Socialistas justo cuando en esa sede se llevaba a cabo toda la operación del voto por correo de 2008, que acabó en condenas para, entre otros, el exsecretario general del PSOE, Dionisio Muñoz, y el presidente de CpM, Mustafa Aberchán.
Este individuo, si tuviese dignidad dimitiría de sus cargos, pero está ahí por la supervisión enfermiza en las redes que le han encomendado. Lo que viene a ser lo mismo que el chivato de turno, el que informa a su amo sobre lo que opinan libremente los melillenses en las redes. ¡Menudos demócratas! Vamos camino de dos años desde que esta gente ha vuelto al gobierno y no han hecho nada. Aquí no hay desprestigio que valga: uno se desprestigia solo. A la hora de votar hay que pensarlo bien y no hay que dejarse manipular. Votar a un partido que mantiene a "políticos de esta calaña" es apostar por perjudicarse a sí mismo. Disfruten lo votado.