El consejero dice que no le constan incidentes graves en el centro l Afirma que los trabajadores de la entidad no están olvidados
El consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, aseguró ayer a El Faro que en el menor tiempo posible se habilitará un nuevo módulo de acogida en el centro de La Purísima. De esta forma respondió a las críticas realizadas ayer por el Comité de Empresa de dicha institución en la que afirma que el centro hay 110 menores más de su capacidad y que no cuenta con más personal para atenderlos.
Ventura destacó que el nuevo módulo se construirá al lado del actual aprovechando unas aulas de formación. Pero no sólo se contará con una nueva infraestructura para acoger a unos 40 o 50 menores, sino que se contratará al personal especializado para su atención, aseveró.
El nuevo módulo, en el que ya se está trabajado por parte de la Administración local para sacar cuanto antes los pliegos de los contratos, tendrá al menos diez cuidadores, cuatro educadores, un coordinador del módulo y una limpiadora. Ventura hizo hincapié en que este proyecto se llevará a cabo a través de un “procedimiento de urgencia”, porque el deseo de la Consejería es que esté “cuanto antes” en marcha.
También contestó a las críticas del Comité de Empresa que asevera que hay “incidentes graves” en el centro cuando se les impide marcharse. Ventura aseveró que no le consta que se haya producido ninguno desde que es consejero. De hecho apuntó que los motines que hubo hace meses fueron provocados por mayores de edad que estaban en el centro mientras se resolvía su situación.
Además, el consejero de Bienestar Social destacó que no sólo se mejorarán los espacios de acogida de los menores, sino que su meta es acondicionar el resto de dependencias para procurar todos los recursos posibles a los menores y a los trabajadores del centro para que puedan desarrollar su labor de educadores y cuidadores.
En este sentido, señaló que ni la Consejería ni la Ciudad ha dejado “abandonados” a los empleados de La Purísima. Aseveró que se trabaja “intensamente” porque conocen las necesidades del centro.
Cinco en plantilla
En cuanto a la demanda de plantilla que solicita el Comité de Empresa de La Purísima, Ventura reconoció que de momento no se ha podido aumentar el número de trabajadores.
El consejero reconoció que la empresa gestora del centro aumentó la plantilla en el módulo de acogida en enero debido al incremento de menores acogidos por la llegada de sirios a la ciudad. Estos profesionales se han mantenido a lo largo del año porque no se ha reducido el número de menas en el centro, apuntó. Así, agradeció a la empresa su disposición y voluntad por aumentar los empleados de este módulo.
También afirmó que hasta ahora la Consejería no ha asumido el coste de esos trabajadores, pero subrayó que lo hará en breve. Ventura destacó que la Ciudad ya tiene redactado un proyecto para modificar el presupuesto destinado al centro y poder así asumir a estos cinco trabajadores del módulo de acogida.
De esta forma, se resuelve una de las reclamaciones realizadas ayer por el Comité de Empresa que aseveró que la gestora del centro quería “extinguir” el refuerzo de estos cinco empleados.
Aumento de menores
Por otro lado, el consejero de Bienestar Social indicó que es cierto que hay 290 menores en La Purísima actualmente, aunque apuntó que “por experiencia” sabe que muchos se marchan del centro porque no quieren estar allí.
No obstante, resaltó que el objetivo de la Ciudad es no haya ningún menor en la calle y por lo tanto, aumentará el número de acogidos en dicho centro.
De ahí que no sólo se vaya a habilitar un nuevo módulo e incorporar a los cinco empleados en el contrato del centro, sino que en noviembre llegarán diez trabajadores de los Planes de Empleo para realizar actividades de ocio y tiempo libre con los menores. Resaltó que son seis meses de refuerzo y “aliviarán el trabajo” de los empleados del centro.
Los trabajadores
El consejero de Bienestar Social destacó que la imagen que tienen tanto los trabajadores, como los menores y el centro es “muy negativa” por parte de la sociedad melillense y quiere combatir este prejuicio. “No es justo”, aseveró para ningún colectivo. Por ello, insistió en que se va a “aliviar al máximo” las necesidades de esta institución porque desea las mejores condiciones de trabajo a los empleados y la mayor calidad de vida posible a los menores.
Los menores cumplen con el régimen disciplinario del centro
Otra de las críticas del Comité de Empresa de La Purísima es que se “exige” a los trabajadores que “retengan” a los menores en el centro a pesar de que se trata de una institución que tiene un régimen abierto. Sin embargo, el consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, aseveró que La Purísima además de ser un centro de acogida tiene un régimen disciplinario, que desconocen algunos educadores, y por lo tanto, los menores deben cumplir con estas normas. Así, Ventura destacó que los menas que de forma “reiterada” no cumplan con los horarios del centro, tendrán una sanción.
“Al igual que un padre castiga a sus hijos si se saltan las normas”, añadió.
Los menores ‘rebeldes’ deberán permanecer en el centro durante dos días participando en actividades programadas, aseveró el consejero, que añadió que no se trata de que estén encerrados en el módulo, sino que no paren de practicar deportes o hacer talleres. “Lo que se hace es proteger y educar al menor”, subrayó.