Los usuarios del Gámez Morón fueron los primeros en subirse a los veleros l Los talleres para niños les enseñan a reciclar l El simulador de navegación de la Armada permite escoger entre submarinos y fragatas.
Los monitores sacaron los chalecos de las fundas y empezaron a repartirlos entre el grupo. Había quien no quería ponérselo. Pero era necesario para subirse a los pequeños veleros que les esperaban en el mar. Así comenzó el día de aventura que vivieron ayer los usuarios del Gámez Morón. Un total de 26 personas participó en la actividad de vela adaptada que durante una semana pretende hacer llegar este deporte a los ciudadanos con todo tipo de discapacidad. El presidente del Comité Organizador de la Semana Náutica y consejero de Educación, Juventud y Deporte, Antonio Miranda, visitó la zona del puerto donde se inició esta iniciativa.
Miranda aseveró que la vela adaptada es una de las acciones que más importancia tiene porque permite eliminar todas las barreras para personas que no tienen nada sencillo acercarse a los deportes. De hecho, este proyecto no sólo se imparte en Semana Náutica, sino que también se desarrolla durante todo el año. Al menos se llevan a cabo tres campañas para que todos los colectivos de personas con diferentes discapacidades puedan participar y conocer el mar a través de la vela.
El presidente del Comité Organizador señaló que en cada pequeño velero van seis personas y un monitor para mostrarles cómo se navega y para que disfruten de las vistas de la playa de Melilla.
Tras esta visita, Miranda inauguró el primer viaje del barco Golondrina. Tiene una capacidad para 90 personas y como realizará unos seis viajes al día, se espera que unas 2.500 personas puedan conocer la costa de la ciudad y la zona de regata en estos días.
Los primeros en subirse a este navío fueron los usuarios del Centro Social de Mayores.
Conciliación familiar
Por su parte, el presidente de la Autoridad Portuaria, Miguel Marín, que se sumó a la comitiva, destacó que la Semana Náutica es mucho más que una competición deportiva. Aseveró que el objetivo de la Ciudad siempre es acercar a toda la sociedad melillense este evento deportivo.
Para ello, indicó que se oferta a los ciudadanos el barco Golondrina, la actividad de vela adaptada o los talleres infantiles. En este último caso, Marín destacó que se trata de una iniciativa que permite conciliar la vida familiar con la laboral. Indicó que los padres pueden dejar a sus hijos de entre 4 y 11 años en el Puerto Noray de 11:00 a 13:00 horas.
Por otro lado, Marín destacó que la Semana Náutica ofrece una imagen de la ciudad diferente a la que suele aparecer en los medios de comunicación, como la relacionada con la inmigración irregular o el terremoto de enero. Es más, subrayó que es muy rentable esta actividad en relación a la proyección que tiene en el resto del país.
Las manualidades
En la visita de Miranda y Marín a los niños que estaban participando en los talleres infantiles descubrieron que su objetivo era pintar una gran caja que serviría de base para pegar los nudos marineros.
La coordinadora de esta iniciativa, Elvira Molina, señaló que todas las actividades están enfocadas para que los pequeños utilicen materiales reciclados. Hoy harán medusas con botellas de plástico y para los próximos días confeccionarán un traje de marinero de recortes y un barco con palos de helados.
Un simulador de navegación
Por último, los melillenses podrán visitar el simulador de navegación que ha instalado la Armada en una de las oficias del Puerto Noray. Se puede escoger entre fragatas, patrulleras, submarinos y todo tipo de veleros.
El brigada del Cuerpo General de la Armada Óscar Moreno Hernández explicó que este aparato fue creado por un compañero y que hay varios distribuidos en España. Bromeó con que los padres llevan a los hijos para que prueben el simulador y acaban apartando a los pequeños para manejar ellos el timón.
Para ver el vídeo de la noticia, entre AQUÍ