La variante ómicron del covid-19 es la predominante en las aguas residuales de Melilla. Así lo anunció el consejero de Medio Ambiente y Sostenibilidad, Hassan Mohatar, en la rueda de prensa de este viernes, donde también informaba del último resultado del estudio del impacto del covid-19 en las aguas residuales.
Este último resultado corresponde a la primera semana de este mes, del 2 al 8 de enero, y en el informe se refleja una "estabilidad" en cuanto a la presencia del virus en las aguas residuales de la ciudad.
Según Hassan Mohatar, la novedad de este último estudio remitido en que se ve reflejada una prevalencia de la variante ómicron sobre la variante alfa del virus en Melilla.
"En las semanas anteriores, la del 13 de diciembre y del 20 de diciembre, hubo cierto aumento del virus en las aguas residuales de Melilla y la última semana hay cierta estabilidad", aseveró.
La presencia de ómicron
En el informe anterior, referente al mes de diciembre, ya se veía reflejada la presencia de la variante ómicron de la covid-19, aunque la variante delta era la cepa predominante antes del 20 de diciembre. Mohatar explicó a El Faro que durante las semanas analizadas ha habido presencia de covid en las aguas residuales de la ciudad.
En las dos primeras, la determinación era “estable”; mientras que entre el 13 y 25 de diciembre se produjo un aumento. Esto quiere decir que en esas semanas aumentó la presencia del virus del covid en las aguas residuales de Melilla.
En aquellas declaraciones el consejero señaló que el estudio sigue dando parámetros positivos del virus del covid en las aguas de Melilla, pero “no ha habido un aumento significativo” de la presencia del virus.
Según los resultados del informe, en Andalucía, concretamente, Málaga y Granada, la variante ómicron también es la predominante. A diferencia de Melilla, cuyas tendencia del virus parece mantenerse estable, en estas dos ciudades se encuentra "en aumento", registrando en Granada un "aumento significativo".
Las aguas residuales confirman que ómicron ha desplazado a la variante delta en España
Los estudios de las aguas residuales reflejan la expansión de la variante ómicron de coronavirus, que ha desplazado "casi por completo" a la delta, con concentraciones que baten un nuevo récord en los primeros días del año desde que comenzaron las mediciones en junio de 2020.
Según ha informado este viernes el Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco), los últimos análisis realizados en el marco del proyecto VATar-COVID-19, en el que participan 38 depuradoras españolas, registraron a partir de las muestras tomadas entre el 2 y el 8 de enero un nuevo máximo de concentraciones de SARS-CoV-2 en aguas residuales.
"Esta tendencia constante de aumento, presente durante las últimas semanas, podría indicar que aún no se ha llegado a los niveles de detección máximos en las aguas residuales", ha explicado el Miteco, que ha aclarado no obstante que "en algunas ciudades comienza a detectarse posibles señales de estabilización".
Desde la aparición de la ómicron, la dominancia de la variante delta se ha visto paulatinamente reducida en las aguas residuales analizadas, pero estos últimos días se ha registrado un "descenso drástico" de Delta, ha asegurado el ministerio, que desde diciembre es capaz de detectar en los laboratorios nuevas variantes de covid-19.
Las pruebas se llevan a cabo a partir de un ensayo PCR que permite detectar la presencia de mutaciones exclusivas para cada una de las variantes del SARS-CoV-2, ha apuntado el Miteco.