Interior resalta que más de 10.000 inmigrantes han intentado saltar las vallas en 2014.
Un total de 3.501 inmigrantes han conseguido entrar en Melilla en lo que va de año, una cifra que supone un 234% más que los que lo consiguieron en el 2013. Según datos facilitados por el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, durante la inauguración del curso ‘Extranjeros privados de libertad’, que se desarrolla en el Campus de la ciudad, en el 2014, más de 10.000 inmigrantes han tratado de acceder por las fronteras de Melilla y Ceuta. Es una cifra que muestra “la extrema presión” que sufren las dos ciudades, tras el control de la ruta atlántica.
Fernández Díaz recordó que, sólo el pasado 28 de mayo, 400 subsaharianos saltaron la valla fronteriza de Melilla, en un intento protagonizado por unos mil inmigrantes.
El ministro subrayó que la inmigración es una cuestión fundamental para el desarrollo de los estados, pero siempre que se haga de una manera “ordenada” y que no supere la capacidad de integración de las sociedades, ya que, de lo contrario, se puede convertir en un problema que puede llegar “perturbar” la convivencia. En este sentido, añadió que dentro de unas décadas las tasas de natalidad en España serán tan bajas que la inmigración será necesaria para mantener el país.
Un pacto de Estado
El titular de Interior destacó que el fenómeno migratorio debe ser tratado “con responsabilidad y no con demagogia”, de ahí que haya insistido en la necesidad de alcanzar un pacto de estado en esta materia. Resaltó esta solicitud en el hecho de que no se puede exigir a Europa una postura comunitaria en materia de inmigración, cuando no existe un consenso nacional.
“La política de inmigración no es de derechas ni de izquierdas, es una cuestión de Estado”, aseveró el ministro.
Fenómeno mundial
Durante su intervención en el campus universitario de Melilla, Fernández Díaz indicó que los problemas migratorios se han convertido en un fenómeno mundial, que no afectan únicamente a Melilla y Ceuta, sino que tienen una dimensión internacional de “gran complejidad”. No obstante, aseguró que las “grandes avenidas” de inmigrantes, que se están produciendo sobre todo en Melilla, suponen un grave problema, ya que estas personas ponen en riesgo sus vidas y, a su vez, la de los agentes que tienen el mandado de hacer cumplir la ley.
En este contexto, el ministro del Interior reconoció el “difícil” papel que tiene la Guardia Civil y la Policía Nacional en sus funciones de control y resguardo para garantizar la “inviolabilidad” de las fronteras españolas, que son también las de toda la UE.
Contener entradas masivas
El titular de Interior resaltó el compromiso del Gobierno con Melilla y Ceuta. Señaló como prueba de este interés las medidas que se han adoptado para contener las últimas entradas masivas. Así, señaló el refuerzo policial, con el envío de módulos de intervención rápida de GRS de la Guardia Civil o grupos de las Unidades de Intervención Policial (UIP). También apuntó el refuerzo de las medidas pasivas en la valla, con la instalación de casi 26.000 metros lineales en los perímetros de las dos ciudades. El ministro añadió que la malla antitrepa ya estaba instalada en todo el perímetro y que se contrató por el procedimiento de emergencia, “trabajando durante el día y la noche, para su colocación”. Fernández Díaz ensalzó la eficacia de esta medida, aunque señaló que “no se ha bajado la guardia” ante la posibilidad de nuevas entradas de inmigrantes por el perímetro fronterizo entre Marruecos y Melilla y Ceuta.
El ministro del Interior también alabó la colaboración de Marruecos, país al que reconoció su cooperación, ya que “sin su ayuda sería difícil hacer frente a la presión migratoria actual”. Por último, señaló el trabajo que se ha realizado desde el Ministerio para descongestionar el CETI.