"Un curso más, la situación de la educación en Melilla sigue siendo horripilantemente mala"

El presidente de la FAMPA de Melilla y miembro de la directiva nacional de la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnado (CEAPA) explica los retos educativos para el próximo curso. Pasan, a su juicio, por conseguir bajar las ratios, conseguir un Consejo Escolar local o una buena aplicación de los nuevos currículums incluidos en la LOMLOE, la nueva ley educativa que este curso empieza a rodar.

- Comienza un nuevo curso escolar, ¿qué retos educativos se plantean desde la FAMPA?

- Nos preocupa, por ejemplo, la aplicación de los nuevos currículums derivados de la LOMLOE. Es importante que los profesores administren bien el cambio porque es una nueva manera de dar la materia. El temario no cambia pero sí que se plantea no memorizar tanto y aprender más con la experiencia. Tenemos un poco de inquietud porque los profesores tienen que adaptarse mucho después de muchos años haciendo las mismas cosas de la misma manera. Es un cambio de mentalidad importante. Es un paso adelante pero exige un esfuerzo significativo de la comunidad educativa. A todo esto ayudaría el contar con unas ratios adecuadas.

- Sí, efectivamente, pero este curso han descendido, según han apuntado desde la Dirección Provincial…

- En Melilla tenemos prácticamente las peores ratios de España. El año pasado se hizo un esfuerzo y se pusieron aulas extras donde no había, en ‘no aulas’, pero aún y todo seguíamos teniendo unas ratios muy altas. Esto sabemos que no se va a solucionar fácilmente. Nuestra ciudad sigue a la cabeza de natalidad en España aunque ha descendido. Y aquí, aparte del Gabriel de Morales que se tiene que inaugurar y será ya para el curso siguiente, no hay nada más proyectado. Nosotros lo que planteamos es que se haga una planificación correcta para el futuro. Nos tendríamos que sentar todas las partes implicadas y buscar una solución; hay que dejar de poner parches continuos a los problemas educativos.

Y un descenso de ratio es cuando un niño está en el mismo centro escolar desde Infantil hasta terminar Primaria con los mismos compañeros y en la misma clase. No si los niños cambian continuamente. Al final, las estadísticas cada uno las lee como quiere leerlas. No solo tenemos unas ratios malísimas, digan lo que digan, sino que seguimos a la cabeza en las listas negativas.

- ¿Se refiere, por ejemplo, a alumnos repetidores o a las cifras de abandono escolar?

- Efectivamente. En fracaso escolar somos los segundos de España, solo por detrás de Ceuta. Y es cierto que hemos tenido un descenso pero ha sido ficticio, mientras la frontera ha estado cerrada. Nosotros seguimos siendo una ciudad fronteriza pero el Ministerio de Educación, en Madrid, parece que no entienden esto: la parte más desfavorecida intenta pasar a la parte más favorecida para tener, por ejemplo, sanidad y educación. El nivel de abandono escolar es escandaloso. Solo aprueban un 57% de los niños, cuando la media estatal es de más del 80% y por ejemplo casi del 95% en el País Vasco. La situación de la educación en Melilla, para nosotros, sigue siendo horripilantemente mala.

- Hace poco Save the Children hablaba de segregación educativa en Melilla, ¿se puede relacionar con estas cifras de abandono y de fracaso escolar?

- Es cierto que esa segregación sale de una manera un poco natural por la situación de los barrios periféricos. Pero luego los padres hacen verdaderos esfuerzos para llevar a sus hijos al colegio que consideran mejor, incluso si no les corresponde por zona. Lo ideal sería que todos los colegios estuvieran bien para que no se dieran estas situaciones. Y no se puede hablar de una segregación solo por un tema religioso sino también por un tema económico. Porque en un determinado barrio, las familias con posibilidades económicas no llevan a sus hijos al colegio de allí. Y eso es así. Si se hiciera por distrito único, sin tener en cuenta la cercanía, eso podría ser muy positivo o muy negativo. Pero no sería una mala opción y habría que plantearlo.

- Y en Melilla comenzamos un nuevo curso sin Consejo Escolar, que es una de las reivindicaciones más repetidas desde la FAMPA…

- El día 24 de este mes tenemos una reunión de la CEAPA y vamos a fijar una fecha para hacer una reunión del Consejo Escolar estatal en Melilla. Esperamos que ese Consejo Escolar pueda escuchar a todas las partes implicadas. Mi idea es que no solo participen asociaciones de padres, sino también por ejemplo, profesores y distintas entidades educativas.

- ¿Pero va a haber aquí una reunión del Consejo Escolar estatal cuando no se cuenta con uno local?

- Es una de las reivindicaciones que tenemos históricas. Pero la única respuesta que nos dan los que hacen las leyes, o sea, el Ministerio, y también la Dirección Provincial, es que la ley no lo contempla. Porque es una excepcionalidad el hecho de que no tengamos transferidas las competencias educativas. Así que en Ceuta tampoco hay Consejo Escolar. Hace ya casi cuatro años, cuando se hicieron las últimas elecciones locales, todos los partidos políticos, incluyendo al PSOE, se comprometieron a trabajar para conseguir un Consejo Escolar en Melilla. Por el PSOE asistió Elena Fernández Treviño. Evidentemente, como políticos que son, quieren contentar a todos, pero luego, pasadas las elecciones, ya les ha dado igual todo. Se supone que ahora hay un gobierno progresista, son ellos los que legislan en Madrid, y parece que les da igual si los padres participan o no. Solo quieren perpetuar su poder, cuando precisamente la LOMLOE habla de que siempre tiene que haber una participación muy activa de las Asociaciones de Padres dentro de la educación. Es ilógico que defiendan esto y luego no quieran un Consejo Escolar.