Algo les habían dicho, pero preferían esperar a que la Asamblea se reuniera y se aprobara de forma oficial. El Banco de Alimentos es una institución galardonada este año con una placa al Mérito Social.
Sus muchos años dedicados a ayudar a los más necesitados de Melilla le hacen valedor de este reconocimiento que ayer fue concedido por unanimidad por parte de los diputados del pleno de Melilla. Juan Paredes, el presidente del Banco de Alimentos, asegura que todo el equipo que forma parte de la ONG está muy “agradecido” por esta distinción. Paredes explica que lleva al frente de la entidad desde el 2006, cuando se creó en la ciudad. Desde ese año, no ha parado de crecer el número de personas que pide ayuda de alimentos. Pero la cuestión ahora es que no hay espacio en su sede para acoger los kilos de productos que hacen falta para atender a tantos ciudadanos. Afirma que sería “la mayor alegría” contar con un almacén más grande, donde poder guardar los miles de kilos necesarios para las 8.500 personas que dependen de la ayuda que les presta dicha entidad.
El presidente del Banco de Alimentos señala a El Faro que por mucho que han negociado con diferentes instituciones, no consiguen un local con los metros suficientes para almacenar la comida que llega de la Comunidad Europea y las donaciones que consiguen los voluntarios de supermercados, fábricas y otros bancos de alimentos de la península.
Ahora cada vez que llega un gran cargamento tienen que repartir lo más rápido posible los alimentos para poder albergar el resto de la partida. Además, tiene un inconveniente más la sede pequeña que actualmente tienen en Las Palmeras: No hay espacio para una cámara de frío e incluso de congelado. En más de una ocasión han tenido que rechazar un cargamento de fruta y verduras de la península porque no tenía un lugar donde se pudiera almacenar este tipo de productos.
Cada vez que sueña con un almacén más grande, la imaginación de Paredes le lleva a idear un programa de reparto en el que las familias de Melilla más necesitadas podrían recibir productos lácteos, frutas e incluso pescado y otros alimentos congelados, que también les ofrecen en algún supermercado. Pero la realidad de la entidad es que no tienen ese espacio sobrante para instalar cámaras de frío. No obstante, nadie quita a los voluntarios de la ONG esta idea de la cabeza. Van a seguir luchando por ese nuevo almacén que es un sueño, pero que será una realidad algún día.
Los beneficiarios
Paredes explica que el Banco de Alimentos nació porque el director de esta misma institución de Málaga le animó a fundar la ONG en Melilla para atender a las miles de personas que no tenían ningún tipo de ayuda, más allá de la caridad de Cruz Roja o de los grupos de religiosas que hay en la ciudad.
En el año 2006 había 1.300 beneficiarios en el Banco de Alimentos, recuerda Paredes. En diciembre de 2014 la cifra había ascendido a 8.500 personas. Paredes explica que además hay que sumar otras 8.500 personas que atiende la Cruz Roja, que también recibe alimentos de la Comunidad Europea. Por lo tanto, señala que hay 17.000 personas inscritas de forma oficial en el Banco de Alimentos de Melilla que reciben todos los meses esta ayuda.
Reparto
De alimentos. Esta semana se ha finalizado un reparto de alimentos, para dar cabida a las nuevas donaciones que llegan de diferentes partes de la península. De Tarragona ha llegado cuatro palés de papillas infantiles y de Madrid, dos palés de legumbres y arroz.
Objetivo
De estos meses. El Banco de Alimentos dedicará estas semanas a recoger el mayor número de donaciones posibles para llenar el almacén de cara a poder hacer un reparto de alimentos para repartirlos antes de Semana Santa.
15.000
Personas. El presidente del Banco de Alimentos asegura que reparte productos de la Comunidad Europea a unas 8.500 personas. Además, asevera que se echa una mano a otras 6.500 que son beneficiaras de otros alimentos que se consiguen a través de donaciones de supermercados.
El Pleno de la Asamblea aprobó ayer por unanimidad todas las propuestas realizadas por la Consejería de Cultura respecto a la entrega de dos placas al Mérito Social, una al Banco de Alimentos y otra al presidente del Club La Amistad, Gregorio Castillo, así como la concesión del título de Hijo Adoptivo al director de los Cursos de Verano de la Ciudad de Melilla y profesor de la UGR, Manuel Ruiz Morales.