Directivos de la empresa afirmaron a El Faro que sólo adeudan una mensualidad. El sindicato se reúne hoy para “adoptar medidas”. UGT no traga con las declaraciones que el dueño y el director de Recursos Humanos de Serramar, Mariano Pastrana y José Manuel Manzano, respectivamente, hicieron el pasado martes a El Faro. Ambos directivos piden “un poco de comprensión” (por el retraso en el pago de nóminas), aseguran que sacarán la empresa adelante “por pelotas” y que en cuanto el Ministerio de Empleo les pague lo que les debe, abonarán la mensualidad que adeudan a sus trabajadores de Melilla.
Ayer la secretaria de Acción Sindical de la Unión General de Trabajadores en Melilla, Maite Molina, salió al paso a ambos directivos y aclaró que deben de tres a cinco nóminas: “Serramar miente. A los vigilantes se les adeudan la paga de junio, julio y la extra de verano. Además hay un trabajador de La Casa del Mar al que le deben las nóminas desde el mes de abril. Nada de lo que dicen los dirigentes de la empresa es cierto”, señaló en un comunicado de prensa.
Asimismo Molina contestó a Pastrana y Manzano, que apuntaron el martes a El Faro que “no están las circunstancias para que Serramar cierre”, que “los más interesados en que la empresa no eche el cierre son los trabajadores”.
Molina afirma, además, que lo que sí sabe UGT, a través de la información que le ha facilitado la Dirección del Área de Trabajo, es que la Administración está al corriente de pagos con Serramar. Por eso, subraya, los trabajadores se preguntan qué está haciendo Serramar con los ingresos con los que debería abonar los sueldos de los vigilantes de Melilla.
Promesas incumplidas
Maite Molina recordó también que los directivos de Serramar habían prometido a la plantilla que antes de agosto saldarían su deuda con los trabajadores de Melilla y ese compromiso se ha quedado en el abono de 700 euros, a cargo de la nómina de junio, “únicamente a dos trabajadores por lo que la empresa a día de hoy sigue adeudando la nómina de junio, la extra y julio”, recalcó.
Y estos impagos no son los únicos, insistió, “porque a estas alturas hay un trabajador que presta servicio en La Casa del Mar que la última nómina que cobró fue la del mes de abril”.
En opinión de la dirigente de UGT-Melilla , ha caído por su propio peso la excusa de Serramar de que el impagos de los sueldos de los trabajadores de Melilla se debía a que el CETI se había retrasado en el abono de dos facturas.
“Dijeron que una vez estuviese solucionado este problema, los sueldos se abonarían en tiempo y forma, algo que no ha sucedido, toda vez que director del CETI ha afirmado a UGT que están pagando puntualmente”, señaló Molina.
La secretaria de Acción Sindical de UGT-Melilla se refiere a los 86.000 euros que el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes abonó a la cuenta de Serramar este mes, según comentó a El Faro Dámaso García, representante sindical de los vigilantes del CETI.
De ahí que Molina se pregunte por qué los trabajadores no cobran y critica que Mariano Pastrana no haya abordado con El Faro el impago de las nóminas a los trabajadores de Melilla y haya echado balones fuera, culpando a la Administración y a determinadas empresas de construcción.
“En realidad en Melilla sólo tienen un pequeño contrato con una constructora, donde prestan servicio únicamente dos vigilantes. La cruda realidad de la actual situación es que los trabajadores están desesperados porque no cobran, pero sí asumen su responsabilidad de ir cada día a trabajar en estas penosas circunstancias”, espetó.
Por último Maite Molina apuntó que hoy, a partir de las once de la mañana, se reunirá en asamblea la sección sindical de Serramar en Melilla para analizar la situación actual y “adoptar las medidas que se consideren oportunas”, para que los empleados de la ciudad se les paguen sus nóminas.