El director del Campo de Golf solicitó el aplazamiento de su comparecencia prevista para ayer. El juez le vuelve a citar en mayo.
El director del Campo de Golf Ciudad de Melilla, Enrique Bohórquez López-Dóriga, no compareció finalmente ayer en el juzgado, tal y como estaba previsto, según el auto de imputación de la investigación abierta sobre la gestión de estas instalaciones. Bohórquez solicitó la suspensión y aplazamiento de su comparecencia días atrás alegando motivos médicos, según informaron fuentes judiciales a El Faro. El juez le ha vuelto a citar para el próximo mes de mayo.
En el auto judicial emitido el pasado mes de febrero, el juez instructor imputa a Bohórquez, por el momento y hasta oír su declaración, precisa, delitos de apropiación indebida, malversación, prevaricación, contra la Hacienda Pública y tráfico de influencias.
Esta investigación se inició en agosto del año pasado, tras la denuncia interpuesta por el periodista melillense Juan José Medina sobre unas supuestas irregularidades en la gestión del campo de golf. Tal y como recoge el auto judicial, las primeras pesquisas de la Guardia Civil que desarrolla la investigación bajo la instrucción del Juzgado número 5 de Melilla, se desprende “la existencia de múltiples irregularidades en relación a la gestión del Club Campo de Golf ciudad de Melilla y el control de la citada gestión por parte de la Ciudad Autónoma de Melilla”.
Concretamente, los investigadores detectan un total de 21 supuestas irregularidades en las que, al menos quince, estaría implicado de manera indiciaria Bohórquez, según el auto judicial.
La gestión del campo de golf
Según los investigadores, Bohórquez “tuvo como objetivo inicial hacerse cargo de las instalaciones públicas del campo de golf y de la subvención que conllevaba esta gestión, no habiéndolo conseguido a través de la obtención de la Presidencia de la Federación Melillense de Golf, por lo que se alió con personas próximas al PP y al Gobierno de la Ciudad, como Javier Mateo, José Vallés y J.A.C.C., logrando el 20 de noviembre de 2009 constituir la asociación Club Campo de Golf Ciudad de Melilla, de los que aquéllos formaban parte de su junta directiva”. El capital social con el que se constituyó el Club Campo de Golf era de sólo un euro.
“Posteriormente (Bohórquez) fue nombrado director de las instalaciones por el consejero de Deportes y Juventud de la Ciudad sin ostentar la condición de cargo o empleado público”, señala el auto.
En el documento, la Guardia Civil destaca las relaciones entre el director del campo de golf con los miembros de su junta directiva, el PP de Melilla y el Gobierno de la Ciudad. Así, reseña que Mateo y Vallés ostentaban cargos en la junta del Club, además de ser viceconsejero de Turismo y presidente de la Fundación Melilla Monumental, respectivamente. Ambos son “amigos y compañeros” del entonces consejero de Deportes y Juventud, Francisco Robles, que concedía la subvención para la gestión del campo de golf. Por otra parte, el auto destaca la “relación de amistad” entre Bohórquez y el consejero de Fomento, Miguel Marín, quien se hizo socio del Club dirigido por Bohórquez.
Además, el director del campo de golf es presidente de la Federación Melillense de Golf y del Club Campo de Golf desde finales de 2013 hasta ahora, por lo que los investigadores consideran que se vulnera los Estatutos de la Federación Melillense de Golf, pues esta situación permite a Bohórquez “adoptar decisiones en beneficio de su propio club”.
Además de Bohórquez, en esta causa judicial están imputados quince personas más entre miembros de la junta del Club, funcionarios y responsables políticos como el vicepresidente Miguel Marín, el director territorial del Ingesa, Francisco Robles, el viceconsejero de Turismo, Javier Mateo y el presidente de la Fundación Melilla Monumental, José Vallés. Las declaraciones de los imputados comenzaron el pasado 17 de marzo, se prolongarán hasta finales de abril y se cerrarán con la de Bohórquez, que ayer fue aplazada hasta mayo. Los que ya han prestado declaración ante el juez instructor son tres miembros de la junta directiva del club.
Las cuentas del Club Campo de Golf
Además de las relaciones de Bohórquez con miembros del PP local y del Gobierno de la Ciudad, el auto judicial señala otras supuestas irregularidades en la gestión del Campo de Golf, como el establecimiento de unos bonos que a mediados de 2014 pasaron a llamarse ‘Promoción Adhesión Greenfees’ “en detrimento de las tasas establecidas por la Ciudad”.
Los investigadores resaltan que cuando el Club únicamente podía tener ingresos de las cuotas de los socios, el primero de ellos que se registra en la cuenta bancaria, de 1.471 euros, corresponde a “Clases de golf Febrero y Marzo’, cuando la Ciudad no había establecido tasas algunas para las clases de golf”, dice el auto. Por otra parte, las subvenciones concedidas por la Ciudad al Club Campo de Golf “desde su constitución” no cumplen la legislación, según la Guardia Civil, porque la entidad presidida por Bohórquez no aportó “la documentación necesaria”, además de contar “con informes técnicos negativos y a pesar de los incumplimientos reiterados del clausulado de los citados convenios por el Club”. A esto hay que añadir, dice el auto, que se han realizado obras sin permisos ni autorizaciones y se ha utilizado las instalaciones públicas para un establecimiento de venta de material y otro de restauración “sin que sus ingresos reporten beneficio alguno a la Ciudad”.
El cobro de las tasas por uso de las instalaciones se hacía por domiciliación bancaria a los usuarios “discriminando a los que no eran abonados al Club, a los que se les cobró el doble de las tasas establecidas por la Ciudad”. Además la recaudación de esas tasas eran ingresadas en la Ciudad “cuando le parecía al Club y sin que la Ciudad tuviese establecido ningún control por las demoras”.