En la madrugada entre este miércoles 14 de junio y el jueves 15 una patera llegó a la playa del Hipódromo, sorprendiendo a los vecinos del Paseo Marítimo que paseaban durante la mañana de este jueves y veían la embarcación varada en la costa.
Según han señalado fuentes de la Delegación del Gobierno, esta barca fue localizada por la Guardia Civil en torno a las 6 de la madrugada y que, de ella, podrían haber saltado varias personas que ya están siendo buscadas por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
De esta manera, todos aquellos que, ya sobre las 10:00 horas de este jueves, iban entrando en la playa o caminaban por el Paseo Marítimo, giraban sus cabezas hacia la patera que había quedado dentro de la arena. Algunos ni siquiera sabían aún lo que había pasado ni porqué estaba esa embaración allí.
José, que había salido a pasear durante la mañana, era uno de los melillenses que todavía no se había enterado de lo que había sucedido en la madrugada y manifestaba que, "si estas cosas siguen pasando es porque algo está mal".
"Hay que cambiar muchas cosas porque ya hemos visto lo que ha pasado en Grecia y son cosas que no pueden continuar así", dice en referencia al naufragio ocurrido en las costas griegas este miércoles y que ha dejado, al menos, 79 migrantes muertos.
María, que dice vivir muy cerca de la playa del Hipódromo, también asegura no haberse enterado de nada hasta que salió a pasear, vio la barca y decidió mirar en los medios de comunicación. "Es una pena cómo esa gente se juega la vida para llegar hasta aquí", comenta.
"Yo lo que espero es que no haya pasado nada y que se pueda ayudar a esas personas de la mejor manera posible", declara.
Antonio y Marta, un matrimonio que también se encontraba por la zona del Paseo Marítimo en la mañana de este jueves destacan que, además del trayecto que hacen los migrantes, ese viaje les cuesta "bastante dinero".
"Esto ha ocurrido toda la vida y, por desgracia, sigue ocurriendo. La gente tiene que seguir ganándose la vida de alguna forma", sentencia Antonio.
Por su parte, Marta dice que "es una pena que haya gente que tenga que verse en esas situaciones" y añade que, aunque ella no vio nada y que ya se enteró de lo ocurrido por la mañana, espera que "no haya pasado nada grave".
Esteban, por su parte, señala que él no se había enterado de nada y que, cuando salió temprano de casa se encontró con la embarcación varada en la arena, lo que le llamó mucho la atención.
También confiesa que, cuando pudo informarse de lo sucedido pensó "inmediatamente" que tanto la Guardia Civil como la Policía "sabrán lo que tienen que hacer para ayudar a esas personas".
A Driss lo que más le sorprendió fue el tamaño de la embarcación y señala que "el hambre es muy mala" y por eso "la gente hace lo que haga falta para ganarse el pan".
"Es difícil controlar estas entradas en Melilla, se puede entrar por varios sitios. Lo único que espero es que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado hayan podido solventarlo de la mejor manera", añade.
Patricia, sevillana que lleva ya 70 años viviendo en Melilla dice sentir que ese tema "le toca un poco de cerca en cierto sentido", ya que, tal y como destaca, su hijo también tuvo que emigrar hacia Inglaterra en busca de trabajo. "Es lo que tienen que hacer las personas para ganarse la vida", remarca.
"Yo no quiero que muera nadie como pasó el otro día en Grecia, hay que prestar ayuda a esas personas", señala Patricia que, a su vez, propone la solución de ayudar a esas personas a mejorar sus condiciones en sus países de origen para que no se vean obligado a tener que venir hasta aquí jugándose la vida.
"Que esta gente venga hasta aquí se debe a la miseria y pobreza que existe en los lugares de donde vienen, por lo que habría que intentar colaborar con ellos", concluye.