Durante este pasado fin de semana se disputó la segunda prueba del Campeonato Autonómico de Ciclismo en la especialidad de Carretera, sobre un circuito de 2,4 kilómetros ubicado en el Paseo Marítimo de Horcas Coloradas.
Segunda prueba del Autonómico de Carretera, valedera para el X Trofeo Federación- Gran Premio SEUR, que contó con una alta participación, y en la que estuvieron presentes todos los corredores que, a priori, poseen opciones de victoria en cada una de las categorías en las que se disputan estos Campeonatos, así como de todos aquellos que coparon los primeros lugares de la general de la I Prueba del Campeonato, disputado el pasado día 4 de marzo de 2018.
Para esta segunda cita de la temporada de carretera, la Federación Melillense de Ciclismo había vuelto a recurrir al circuito ubicado en el paseo Marítimo de Horcas Coloradas. Un circuito muy rodador, pero al mismo tiempo duro, puesto que en el mismo se incluían las dos rampas ubicadas en la zona de la playa, así como la que da acceso a la carretera de la Alcazaba, la cual resultaba muy propicia para ataques, tal y como sucedió ayer.
Así pues, a las 09:15h., se procedía a la apertura del plazo para la retirada de dorsales por parte de todos los ciclistas inscritos. Un total de 41 corredores, pertenecientes a los diferentes clubes ciclistas de nuestra ciudad se dieron cita en la mañana del domingo para tomar parte en la carrera.
A las 10:00h., se daba la salida, en una primera manga, a los corredores pertenecientes a las categorías Promesas y Principiantes, quienes debieron completar dos y cuatro vueltas respectivamente a un circuito acotado en la zona de meta.
En alevines, Luis Castro Jurado volvió a brillar con luz propia e hizo una exhibición de ciclismo a pesar de su corta edad. Sin lugar a dudas, Luis está llamado a ser uno de los ciclistas más prometedores del ciclismo melillense.
Por su parte, en la categoría de Promesas, Rubén García Domínguez (Club Ciclotur Melilla) se impuso con claridad, en una carrera dominada desde el principio
Finalizada la prueba de los más pequeños, se procedía a formar la parrilla de salida para los ciclistas pertenecientes a las categorías desde Cadetes hasta Master 50. Previa a la salida, Guillermo Moreno Rosa, expresidente de la Federación Melillense de Ciclismo, hizo lectura de una carta de agradecimiento y en memoria de José Otero Moldes, fiel colaborador de la Federación Melillense de Ciclismo durante la última década, que falleció el pasado 2 de mayo después de luchar contra una dura enfermedad. Tras la lectura de la carta dedicatoria, se hizo entrega de una placa de reconocimiento por parte la Federación, Clubes y ciclistas de Melilla, así como de un ramo de flores, a la esposa e hijos de José Otero y, seguidamente, se guardó un minuto de silencio en su memoria. Tras el homenaje póstumo a José Otero Moldes, se procedió a dar la salida a esta segunda manga de la prueba, donde se dieron cita todos y cada uno de los corredores favoritos para la clasificación general. Desde el momento de la salida, la carrera fue espectacular y bastante loca. Los primeros ocho kilómetros se rodó a un ritmo infernal, con constantes tirones y ataques que buscaban hacer una primera selección. Sin embargo, el buen nivel de forma física al que llegan los corredores melillenses a estas alturas del mes de mayo evitó la pérdida de unidades, por lo que el pelotón que se formó resultó bastante numeroso.
Entre los kilómetros 10 y 15 de carrera, hubo una pequeña tregua donde los corredores pudieron tomar algo de aire y recuperarse de la fatiga acumulada en las primeras vueltas. Sin embargo, Santi Montoya (Gravity Bikes) rompió dicha tregua al lanzar un potente ataque que obligó al grueso del pelotón a estirarse. Como consecuencia de dicho ataque, el pelotón se fraccionó en tres grupos de 8 y 9 corredores. En cada grupo viajaban corredores de buen nivel que se afanaban en reducir distancia con respecto a los grupos que le precedían.
Desde el kilómetro 20 al 30 aproximadamente, la colaboración entre corredores del mismo y de distintos clubes permitió que de nuevo el pelotón principal se reagrupara, formando un nuevo grupo de 15 corredores. Sin embargo, sucesivas intentonas de fuga provocaron nuevas roturas y, por lo tanto, la pérdida de contacto de corredores que acababan de integrarse en el seno del pelotón principal.
Salvo Montoya, Diez y Molina (Gravity Bikes), Soler (Don Bici), Azdad y Ortigosa (Ciclotur), quienes siempre se mantuvieron en el grupo delantero de favoritos, el resto de corredores veían como en más de una ocasión quedaban descolgados, por lo que tenían que afanarse para reducir distancias e integrarse de nuevo en el grupo.
A destacar la impresionante remontada protagonizada por Abdulilah Mohamed (Ciclotur Melilla) y Joaquín Ledo (Gravity Bikes), que pese a perder 30 segundos respecto al grupo de cabeza, fueron capaces de reducir la desventaja rodando en solitario y consiguieron entrar en la disciplina de dicho pelotón de favoritos en los últimos kilómetros de carrera.
Ya en la última vuelta, a falta de tan solo 2,4 kilómetros para el final, todo hacía presagiar que el desenlace de esta segunda prueba del Autonómico de Ciclismo en carretera sería al sprint. Un sprint con un grupo bastante numeroso gracias a las incorporaciones de última hora. En el sprint final, desde la línea de meta se pudo ver una espectacular e igualadísima lucha por la victoria entre los corredores del pelotón principal, del cual se destacaban tres corredores, dos del gravity y uno del ciclotur. Tras una apretadísima llegada, la victoria recayó en Santiago Montoya Carrelero (Gravity Bikes), seguido del líder de la general Oualid Azdad (Club Ciclotur) y de Alejando Díez (Gravity Bikes), los tres en un pañuelo. Tal fue lo ajustado que resultó la victoria que los jueces tuvieron que visionar en varias ocasiones la grabación de la llegada para determinar el orden de la misma.
De esta manera, Santi Montoya consiguió una nueva victoria, la segunda consecutiva después de la VI edición de la Carrera Africana, y recorta distancias respecto a Oualid Azdad de cara a la clasificación del Open, así como en la general del Trofeo Federación 2018. Al término de la carrera, se llevó a cabo la entrega de medallas y cheques regalo en material deportivo a los tres primeros clasificados de cada categoría en el mismo paseo Marítimo.