Cada 17 de marzo se conmemora el día de San Patricio, el patrón de Irlanda, quien murió ese mismo día, pero del año 461.
La historia recoge que su verdadero nombre era Maewyun Succat y nació a finales del siglo IV en un pequeño pueblo de Escocia.
Se plantea que, después de escapar de unos piratas que lo tuvieron secuestrado, pasó seis años en Irlanda, donde aprendió el idioma celta.
Posteriormente, se trasladó a Francia para formarse como sacerdote y cambió su nombre por el de Patricius.
Con 46 años, volvió a Irlanda para evangelizar a sus habitantes y allí permaneció hasta su muerte.
Según la tradición, San Patricio es el responsable de que no haya serpientes en Irlanda porque él mismo las ahuyentó hasta el mar. Aunque no pasa de ser una leyenda fantástica, la realidad es que numerosos estudios científicos confirman que nunca hubo serpientes en ese país.
En los últimos años del siglo XX, la festividad de San Patricio tuvo un gran impacto mediático por la diáspora irlandesa, que se expandió a nivel mundial a raíz de la hambruna que sufrió la isla de Irlanda en 1845 y cuyo auge ha continuado en el presente siglo.
Convertida en una de las fechas más celebradas en el mundo, este año ha sido incluida oficialmente en el Calendario Intercultural de Melilla por iniciativa de la asociación de Melilla para la UNESCO y como proyecto cultural de la asociación Mem-Guimel, que cuenta con el patrocinio de la dirección general de Relaciones Interculturales, dependiente de la consejería de Educación, Cultura, Festejos e Igualdad.
Por otro lado, el desfile más famoso tiene lugar en la V Avenida de Nueva York, donde se reúnen más de dos millones de espectadores. Allí se celebra la efeméride desde 1766.
Sin embargo, el primer desfile del día de San Patricio fue también en Estados Unidos, pero en Boston, en 1737.
A la propia Irlanda llegó más tarde: primero a Waterford, en 1903, y luego, en 1931, a Dublín.
En tanto, son notorias las celebraciones en otras ciudades como Londres, Montreal, París, Buenos Aires y Chicago, donde, desde 1962, se tiñe con tinte vegetal verde el río que la atraviesa.
Si bien inicialmente el color de San Patricio era el azul, después pasó a ser el típico color verde que lo caracteriza actualmente. El cambio de color se debió a la influencia de la canción irlandesa "The Wearing of the Green", en cuya letra se pide que todo el que sea o se sienta irlandés de corazón, lleve algo verde en el día de este santo.
Como curiosidad, cabe añadir que la Colegiata de San Patricio de Lorca es la única de España que se encuentra bajo la advocación de este santo. Esto se debe a la batalla de Los Alporchones, librada el 17 de marzo de 1452, es decir, el día de San Patricio, entre los habitantes de la ciudad y de otras partes del antiguo reino de Murcia, y huestes musulmanas procedentes de Granada, que habían asolado la comarca de Cartagena.
Las obras de esta instalación se iniciaron en 1533, pero se dilataron hasta 1780. Se trata de un edificio de estilo renacentista, declarado Monumento Histórico-Artístico por decreto del 27 de enero de 1941.
No sin antes agradecer a Denise Garrigan, la asociación de Melilla para la UNESCO desea un feliz día de San Patricio 2022, aunque lo correcto y lo tradicional es decirlo en gaélico: Lá fhéile Pádraig sona dhuit!.