La delegada del Gobierno, Sabrina Moh, acompañada de la vicepresidenta de Melilla, Gloria Rojas, ha visitado este jueves el paso fronterizo del Tarajal en Ceuta.
El recorrido ha servido para conocer de primera mano la frontera del España con Marruecos en la otra ciudad autónoma. Allí han podido intercambiar información con los responsables de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, así como con el equipo de la Delegación del Gobierno de la ciudad caballa, sobre la organización y el funcionamiento del puesto fronterizo.
Además, ambas dirigentes han llegado hasta la zona de embolsamiento de vehículos, puesta en marcha ya en esta primera fase de apertura y que intensificará su afluencia con motivo de la Operación Paso del Estrecho.
Es importante recordar que la visita de las dos representantes socialistas a Ceuta se da en el marco de una nueva etapa del Consejo de Política Institucional de las dos ciudades autónomas que ahora es coordinado por la propia Moh en calidad de miembro de la Comisión Ejecutiva Federal del Partido Socialista (PSOE).
De acuerdo con El Faro de Ceuta, la máxima representante del Ejecutivo de España en Melilla ha explicado en rueda de prensa que el proceso de elaboración de los Planes Estratégicos que para ambos territorios se ha comprometido a presentar este verano el Gobierno de Pedro Sánchez es una "ventana de oportunidades" para dar "un salto cualitativo" a la hora de fortalecer servicios públicos esenciales como Sanidad o Educación.
De hecho, en esta "reconstitución" del Consejo de Política Institucional, el secretario general del PSOE de Ceuta, Juan Gutiérrez, ha pedido al presidente Sánchez un esfuerzo adicional en materia educativa, de vivienda y de transporte para la hermana ciudad autónoma.
No obstante, Moh, Gutiérrez y Rojas han coincidido en alabar el "impulso", la "atención" y la "sensibilidad permanente" que el propio Sánchez y su equipo están ofreciendo a Melilla y Ceuta, ciudades que "hacía mucho tiempo que no despertaban tanto interés".
No saben soluciones los problemas de nuestra ciudad, ni saben acometer la negativa marroquí al paso de mercancías de consumo personal, pero si saben cobrar dietas para viajar alli donde tienen los mismos problemas que nosotros. Dios los cría y ellos se juntan.