Es la segunda entrada de esta semana, con lo que la ocupación en el CETI roza las 850 personas.
En la madrugada del domingo, los efectivos de la Guardia Civil de Melilla rescataron a un total de 23 inmigrantes que viajaban en una zodiac que estaba a punto de hundirse. Todos los inmigrantes son de origen subsahariano.
La embarcación neumática, que llevaba motor, había sufrido un pinchazo en aguas próximas a la ciudad, por lo que fue necesaria la actuación del Grupo Especializado en Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Benemérita para salvaguardar la integridad física de sus ocupantes.
En la zodiac viajaban cinco varones, diez mujeres –tres de ellas embarazadas– cinco menores y tres bebés. Ninguno de ellos requirió asistencia sanitaria una vez llegados al puerto comercial de Melilla al encontrarse en buen estado de salud.
Inmediatamente fueron trasladados a las dependencias de la Jefatura Superior de Policía para aplicarles la orden de expulsión contemplada en la Ley de Extranjería y, posteriormente llevados al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), cuya ocupación se incrementa y roza ya las 850 personas acogidas.
Y es que, esta es la segunda entrada en Melilla en lo que va de semana. El pasado jueves llegaron ocho inmigrantes de origen subsahariano en una barca de juguete a las inmediaciones del faro de Melilla, a espaldas del puerto comercial.
El viernes día 9 también consiguió entrar en la ciudad otro grupo de ocho inmigrantes, con lo que, según informaron desde la Delegación del Gobierno a este diario, la ocupación en el CETI sobrepasaba ya entonces las 800 personas.
Es por ello, que en el CETI se sigue ocupando los módulos de enseñanza y la mitad del comedor con literas prestadas por el Ejército para dar cabida a estos inmigrantes.