Hoy viernes, con la gran corrida de toros, la feria entra en su recta final. Sin duda, la crisis la ha vapuleado poco y la Feria de Día, pese al calor, ha remontado notablemente desde el pasado miércoles. Variada y variopinta, ha hecho además de su necesidad virtud, y mientras convive con el ‘botellón’ de los más jovencitos en los aledaños del Cargadero del Mineral, sus variadas casetas acogen a un público diverso que, sin distinción de edad o sexo, se lo anda pasando en grande, haciendo honor a nuestras fiestas patronales.
Ha logrado también asentarse de pleno en su nuevo recinto de la Plaza Multifunción y está adquiriendo entidad propia en este lugar más diáfano, libre de los recovecos y malos olores que constituían los grandes puntos negros de su anterior versión en el Parque Hernández. Para mayor festejo, se está celebrando sin incidentes dignos de mención. Por tanto, ¡Viva la Feria! y a disfrutarla, que ya queda poco y lo poco que queda hay que vivirlo antes de que termine.