Las ruedas y las cadenas volvieron a salir a la calle para dar la última pedalada del año reivindicando una vez más la seguridad para los ciclistas y todo tipo de usuarios. Bajo el lema ‘Reduce la velocidad, humaniza la calle’, el presidente de la asociación Melilla con Bici, Javier Bocanegra, leyó un manifiesto en nombre de la Mesa de Movilidad Urbana Sostenible y Universal.
Los miembros de la Mesa insistieron en “la necesidad urgente de pacificar las calles, conscientes de que sin un cambio drástico en el concepto de ciudad, será imposible cambiar las cifras de siniestralidad y mortalidad en los próximos años”.
Las medidas concretas que pidieron desde la Mesa de Movilidad fueron “reducir la velocidad a 10 kilómetros por hora en zonas comerciales, residenciales, espacios de infancia y lugares de especial impacto medioambiental; a 20 kilómetros en las calles de plataforma única, zonas residenciales, zonas escolares y sanitarias; y fijar a un máximo de 30 kilómetros por hora toda la red urbana”.
Bocanegra recalcó que “aunque parezca una exageración reducir la velocidad máxima de 50 a 30 kilómetros por hora, numerosos estudios demuestran que el tráfico en las ciudades se hace más fluido dado que, con ello, se evitan los picos de velocidad causantes de atascos, frenazos, estrés al volante e interrupciones”.
Bocanegra también destacó que, al mismo tiempo, la probabilidad de mortalidad por accidente de coche “desciende hasta mínimos”.
Tras el manifiesto, los ciclistas presentes, tanto veteranos como aficionados, salieron de la plaza multifuncional de San Lorenzo dirigiéndose al centro de la ciudad para despedir la última pedalada.
Asistieron grupos de amigos y familias que ya participaron en pedaladas anteriores, siempre con el fin de reivindicar una ciudad más respetuosa con los ciclistas y, además, pasar un buen día en compañía pedaleando por las calles de Melilla.