Manuel Ángel Quevedo, consejero de Medio Ambiente y Naturaleza además de vicepresidente segundo del Gobierno y número 3 de la candidatura del PP en las últimas elecciones municipales del 28 de mayo, se ha ido a la Presidencia de la Autoridad Portuaria y ha dejado atrás su situación de uno de los hombres fuertes del Ejecutivo de Imbroda para esta legislatura. De hecho, incluso ha tenido que renunciar a su acta de diputado de la Asamblea para asumir el nuevo cargo.
El hecho de que fuera designado como vicepresidente de ese organismo portuario con labores ejecutivas ya daba una idea de que Imbroda podía estar planteándose su sustitución en el Gobierno, algo que se ha producido más pronto que tarde puesto que Quevedo apenas si ha estado tres meses al frente de Medio Ambiente, un departamento idóneo para él por sus conocimientos en la materia y su preparación profesional.
El caso es que Manuel Ángel Quevedo se va a hacer cargo de un área que verdaderamente no ha tenido gran protagonismo en los últimos cuatro años más allá de algún que otro enfrentamiento con la parte socialista del equipo que encabezaba De Castro. No se puede hablar de grandes proyectos ni de realizaciones de primer nivel en esos cuatro años, aún cuando existía la posibilidad de crear el muelle de cruceros, una infraestructura imprescindible para que grandes barcos pudieran atracar en Melilla dentro de la política turística que la ciudad necesita.
Quevedo se enfrenta a grandes retos dentro de la Autoridad Portuaria, un organismo cuyos ingresos vienen cayendo año a año, sobre todo desde la pandemia, como consecuencia de la reducción en la llegada de barcos y contenedores. El cierre de la frontera y ahora de la aduana no está precisamente contribuyendo a que sus resultados contables de carácter anual experimenten algún avance positivo.
Quevedo es hombre serio y riguroso en su trabajo, y no va a ser fácil sustituirlo en el Gobierno, además en un área de la importancia de Medio Ambiente, tanto desde el punto de vista presupuestario como de sus propias competencias. Ahí está como ejemplo de su influencia en la vida de los melillenses todo el tema del suministro de agua, no solo en lo que respecta a la desaladora, sino el almacenaje en el pantano de las adelfas y la red de abastecimiento, que precisa seguir siendo renovada prácticamente en toda la ciudad.
Medio Ambiente y Naturaleza es un departamento que no puede llevar el primero que llegue. Esa Consejería pide tener un mínimo de conocimientos y de saber cómo funcionan las obras públicas, la organización en las actuaciones que deban desarrollarse y las normas mínimas en asuntos de emisiones, conservación especial de especies y lugares de cuidados prioritarios por su riqueza medioambiental.
Habrá que esperar a esta próxima semana para saber cuál es la decisión de Imbroda con respecto a la persona que sustituirá a Quevedo, tanto en la Consejería como en la vicepresidencia de la Autoridad Portuaria. Por ahora solo sabe que el escaño que deja libre lo ocupará en estos días José Ronda.