Los miembros de Guelaya y del Movimiento por el Arbolado se concentraron este pasado miércoles en la calle General Marina en una acción-protesta contra las obras de la calle General Marina, que "han costado una millonada" y no han previsto dotar de arbolado la acera de los comercios y viviendas.
Según estos ecologistas, al estar General Marina dentro de la Zona de Bajas Emisiones pensaban que habría restricciones de tráfico. Sin embargo, y según afirman estas personas, al final se ha descubierto que el consejero de Medio Ambiente, Daniel Ventura, "ha pospuesto dicha iniciativa para un futuro indeterminado".
Ello les lleva a considerar que, con toda probabilidad, "lo que se pretende es que con el tiempo el tema se olvide y se diluya, con lo que calle Marina seguirá como hasta ahora, siendo un parking al aire libre, con el consiguiente perjuicio para los ciudadanos quienes dispondrán cada vez de menos espacios públicos destinados a las personas", señalan.
Guelaya ha manifestado que cuando las obras estaban todavía en marcha, intentaron tener una entrevista con el consejero de Medio Ambiente para comunicarle lo que consideran un "error de bulto: una calle con árboles en sus dos laterales ofrecería desde la Plaza de España una visión bella y acorde con los refugios climáticos que necesitamos; pero el consejero no quiso recibirnos".
De ahí que se vean ahora obligados "a pedir que rectifiquen y doten de arbolado a General Marina". En ese sentido, recuerda el colectivo que ya se hizo en la calle Margallo, Luis de Ostariz y Plaza multifuncional atendiendo a la demanda ciudadana. "Aquí también se puede hacer, pero costará más caro ya que la obra está terminada. Aún así sería un dinero bien gastado, los árboles serían para toda la vida y los melillenses lo agradeceríamos cada vez que su sombra nos protegiera. Señor Consejero, decídase a poner árboles en General Marina, aunque sea tarde se lo agradeceremos siempre", concluye.
Me encanta Melisha, en unos días estaran de huelga porque los arboles traen insectos y en unos meses otra protesta porque los arboles tienen muchas hojas y no se podan lo suficiente.