Según subraya en el escrito remitido, la situación de los menores se debe a “una política activa de exclusión”
La Asociación Pro Derechos de la Infancia (Prodein) se ha vuelto a dirigir al Defensor del Pueblo para denunciar la “falta de interés y la nula voluntad” por parte de la Fiscalía de Menores de Melilla, de la Dirección Provincial del Ministerio de Educación, la Delegación del Gobierno y la Presidencia de la Ciudad Autónoma ante la situación en la que se encuentra un centenar de menores sin escolarizar.
Según se pone de manifiesto en el escrito que José Palazón remitió este lunes a la institución, estos niños no tienen plaza en los colegios de la ciudad “como consecuencia de la falta de empadronamiento”. Al respecto, el presidente de la entidad local insiste en que la falta de empadronamiento es el resultado “de una política activa de exclusión a parte de la población de la ciudad”.
En el mismo documento, Prodein puso de manifiesto que se trata de niños que nacieron en Melilla. “Todos hablan español y sus familias también; todos tienen domicilio en la ciudad y a todos les consta el domicilio en su tarjeta sanitaria”, subrayó. No obstante, Palazón expuso que “les resulta imposible empadronarse por motivos que no les son imputables a ellos”.
Por todo ello, la asociación instó al Defensor del Pueblo a que intervenga ante las autoridades citadas anteriormente para que los niños puedan ser escolarizados en el sistema educativo español “en el menor tiempo posible”.
Protestas desde octubre
Al respecto, Palazón recordó que Prodein, junto a los progenitores y a los menores, lleva desde el mes de octubre protagonizando una serie de acciones para protestar por la situación en la que se encuentran los niños, sin haber obtenido una respuesta positiva hasta el momento.
Según expuso la entidad local ante el órgano del Estado, la primera vez que se dirigió a la Fiscalía de Menores de Melilla para denunciar la situación en la que se encuentran los menores no escolarizados fue el 28 de septiembre de este año. No obstante, ante la falta de actuaciones sobre este asunto, Prodein “hizo un recordatorio de deberes legales” el pasado 18 de octubre.
Palazón recordó que el grupo de niños a los que no se ha admitido en centros de la ciudad tienen edades comprendidas entre los cinco y los nueve años. “Tienen la obligación de escolarizar a los menores”, mantuvo en el escrito enviado al Defensor del Pueblo.
Según avanzó Palazón a través de sus redes sociales, pronto mandará un informe a la Fiscalía General del Estado para ponerla en conocimiento de la situación en la que se encuentra un centenar de niños que viven en nuestra ciudad.
Mientras tanto, Prodein continuará con sus concentraciones frente al Ayuntamiento, a la Delegación del Gobierno, a la Dirección Provincial de Educación y la Fiscalía de Menores hasta que estos niños sean admitidos en colegios de la ciudad.
Desde la Administración lo que alegan es que esto es así porque los niños carecen del permiso de residencia, no tienen padrón o porque podrían ser menores que viven en Marruecos. Al no ser aceptados en los colegios de la ciudad, los menores se ven “obligados” a cursar sus estudios en la Residencia de Estudiantes Marroquíes Musulmanes, algo con lo que los progenitores no están de acuerdo.