La Policía Local ha acudido en la mañana de este viernes a regular el tráfico durante la entrada a clase de los niños y niñas del colegio León Solá, tal y como llevan semanas pidiendo los padres y madres del centro. "Después de varios días y solicitarlo por varios medios, hemos logrado la atención de la Policía Local al problema ocasionado por las necesarias obras en los accesos a nuestro centro", han informado desde el AMPA del León Solá.
El Faro acudió este jueves a la salida del colegio para recoger las quejas de madres y padres, quienes pedían que se regulase el tráfico. Aseguran que temen que ocurra "una desgracia" pues hay numerosos vehículos que no respetan las señales de circulación. "Confiamos en que la empresa cumpla las medidas de seguridad necesarias, la presencia de la autoridad se mantenga mientras siga el problema y que asumamos que hay que cambiar los modos de moverse por la ciudad de todos, especialmente apostar por el Camino Escolar", señalan desde el AMPA.
Un peligro
Las madres y padres del colegio León Solá de Melilla aseguran estar hartos: todas las entradas y salidas del centro se han convertido en un problema. Desde hace dos meses hay obras en la acera del colegio que da a la carretera de Hidum y añadido al tráfico y a los padres que van a buscar a sus hijos, la zona se convierte en un revoltijo de coches pitando, otros que se saltan las señales de tráfico, niños y niñas cruzando la carretera y progenitores que van a buscar a sus hijos. Es por ello que piden la presencia de la Policía Local para regular en tráfico cuando los niños y niñas entran a clase y cuando salen.
Najoua Daouib, presidenta del AMPA del colegio León Sola, ha explicado este jueves a El Faro que la salida del colegio supone “una locura, no hay ningún control de policías” y en una mano muestra todas las quejas de padres y madres que han recogido. Explica que los vehículos no reducen la velocidad cuando pasan por ahí y van “como locos”.