Este sábado se cumple un año de la tragedia que se vivió en la valla de Melilla, en la que murieron decenas de personas. Con motivo del aniversario, el presidente del Gobierno de España en funciones, Pedro Sánchez, ha explicado que cuando dijo que la situación aquel día había estado bien resuelta todavía, no había visto las imágenes de lo sucedido. Además, ha abogado por crear cauces para propiciar la migración regular en España y Europa.
El presidente en funciones se sentó anoche en los platós de LaSexta, donde concedió una entrevista a El Gran Wyoming en ‘El intermedio’. Una vez allí, preguntado sobre el aniversario de la tragedia de Barrio Chino, Sánchez aclaró que en su momento dijo que la situación se había resuelto muy bien cuando todavía no había podido ver con sus propios ojos las imágenes de lo que verdaderamente ocurrió en la valla fronteriza aquel fatídico día.
“Evidentemente, cualquier persona –y yo el primero– si hubiera visto las imágenes no habría hecho esa declaración”, ha declarado.
En ese sentido, Sánchez ha explicado que lo sucedido el 24J en Melilla no termina de ser “un gran fracaso que tiene su origen a miles de kilómetros de esa frontera entre Marruecos y España”, y que tiene que ver con diversos factores, como son la persecución política, la desigualdad, el cambio climático y la pobreza.
Por ello, explica que la “aproximación” del Gobierno de España, tanto en nuestro país como en Europa, al fenómeno de la migración se ha dado, primero, a través de la cooperación con los países de origen y de tránsito; y, segundo, la integración de dicho fenómeno en la sociedad.
“La migración forma parte de la historia del ser humano, de nuestro ADN. Siempre va a existir inmigración. Nosotros mismos somos hijos, nietos y tataranietos de personas que emigraron”, dice.
Sin embargo, indica que es fundamental “luchar contra esas mafias que trafican con seres humanos y les hacen morir”. También afirma que es necesario “propiciar una migración regular” porque en España y Europa se necesita mano de obra.
Considera que hay que crear “cauces” para que lleguen inmigrantes de forma regular y circular, con el objetivo de que esas personas puedan venir, trabajar y luego volver a su tierra natal para “impulsar sus economías”.
“Esto es lo que hace el Gobierno de España, y es lo que hemos hecho desde el principio”, afirma. No obstante, lamenta que hayamos tenido que ser testigos de “escenas tan dramáticas” como las que se vivieron hace ya un año en el paso fronterizo de Barrio Chino.